Miguel sentía unos cosquilleos recorrer su cuerpo mientras Luis hacia el masaje, sentía tranquilidad pero igual se sentía tenso.
─ Tranquilo papu, relájate... Estas demasiado tenso.
─ Y-yo, lo siento...
Miguel intentaba no estar tenso pero se sentía demasiado nervioso, pero decidió hacerle caso a Luis, se relajo y sintió mejor el masaje.
Luis estaba tan feliz estando con Miguel pero se sentía un poco extraño.
─ Oye grasoso.
Dijo Miguel con los ojos cerrados, con un tono tranquilo.
─ ¿Si, Miguel?
Dijo Luis con un tono tranquilo mientras le daba sus masajes con delicadeza.
─ Tú... Todavía, ¿me quieres?
Dijo Miguel. Luis al escuchar eso, paró unos momentos y se sorprendió un poco cuando Luis le preguntó eso.
─ Claro que te quiero, pero no me agrada como me trataste en primaria ni en el baño.
─ Yo... Perdón Luis, de verdad quise disculparme pero... No pude.
─ No te preocupes... Esta bien, supongo, además ya aceptaste qué hiciste algo mal. Te quiero mucho Miguel, jamás llegaría a odiarte y si lo hiciera, yo mismo me odiaría.
Miguel sonrió y Luis siguió dándole masajes. Pasaron unas horas y Luis se tuvo que ir de la casa de Miguel dejándole su tarea y algunas cosas que repasar, Miguel cierra la puerta y se dirige hacia su habitación encerrandose, Miguel emocionado se echa a su cama y piensa todo lo de hoy, preparado para empezar un nuevo día.
"Te quiero mucho, Miguel" eso pasaba por la mente de Miguel y no podia evitar ponerse rojo por la emoción que sentía.
Pero de pronto, ese pensamiento volvió.
"Pero soy hetero ¿cierto? No puedo ser gay, no puedo... Decepcionar a mi mamá".
Pensó, el pensamiento sobre su sexualidad fue peor, sentía que algo no estaba bien.
Suspiró, agarró su celular y empezó a ver la hora, ya eran las 10:58, era tarde y su madre no llegaba y tampoco quería llamarla. Quería silencio y calma ahora mismo, se quitó su camisa y se dirigió para apagar la luz de su habitación y dormir un poco.
Durmio a las 11:30, no tan tarde (para el), se levantó a las 6:30, arreglandose para la escuela y ordenando su mochila.
─ ¿Mamá, estas aquí?
Lo suponía su mamá llegaría tarde otra vez, su mamá tenía un trabajo en otra ciudad, ocasionando qué llegara tarde o llegara días después. En cambió, Miguel no se sorprendió y simplemente agarro las llaves y se fue a su escuela cerrando la puerta de su casa, preparándose para otro día más en su colegio.
Mientras caminaba, vio a Luis delante de él, se alegró pero decidio caminar solo estaba algo preocupado por su mamá y también por lo de ayer.
Aunque, el silencio, no duró mucho.
─ Ah ¡Hey papu! ¡Holaa!
Miguel se asustó mientras Luis lo abrazo con fuerza, se sentio un poco nervioso por ese abrazo.
─ Ah, hola Luis.
─ ¿Como estas, papu? ¿Hiciste la tarea?
─ Si, si la hice como siempre.
Luis sonrió y puso su mano en la cintura de Miguel con cuidado sin que el se diera cuenta. Mientras caminaban y platicaban, Miguel se quedaba en silencio y asintiendo lo que decía Luis.
Llegando a la escuela, Miguel y Luis entraron a su salón viendo qué eran los únicos. De pronto, Miguel puso sus brazos en la mesa y echó su cabeza ahí para descansar un poco mientras que Luis solo dibujaba.
─ ¿Papu? Papu despierta, no duermas papu.
Dijo Luis mientras acariciaba la cabeza de Miguel y el solo hacia sonidos.
─ Te dormiste en toda la clase, pero tranquilo papu, nadie se dio cuenta ¡te cuide bien!
— Mhm...
Dijo Miguel mientras dormia un poco más y Luis reía.
─ Duerme un poco más, esta vez el recreo durará más de lo normal, descansa iré por comida.
— Mhm...
Luis salió del salón dejando solo a Miguel, mientras que este solo dormía.
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Almas Gemelas [Papulince y panafresco] [Un Poco De NSFW]
RomanceLuis, un chico de solo 16 años, pensando en su nuevo comienzo y oportunidades que se espera y muy pronto entrar en una etapa importante. En cambio, las oportunidades aparecería muy rápido ¿cierto? Espero que le agrade esta nueva historia entrando al...