He vuelto.

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Estamos en Ciudad Luminalia o bueno, lo que queda de ella, las casas están en mal estado o directamente son escombros y la famosa torre del gimnasio eléctrico está reducida a un montón de rocas con varias cruces de madera.
En este escenario distópico vemos como un hombre encapuchado se acerca al sitio a paso lento con dirección a la torre y al llegar ve a una chica de cabello rubio de unos 16 años.

-Oye chica... ¿Que paso aquí?- preguntó shockeado

La chica volteó la mirada lentamente y al ver el rostro del misterioso hombre sus ojos llorosos se abrieron como platos y su cuerpo se tenzo como si hubiera visto un fantasma

-Ash- musitó incrédula
-Bonie- contesto con sorpresa
-¡Ash!- replicó emocionada

Emocionada la joven se lanzó a abrazar al que una vez fue su compañero de viaje y su mentor

-¿Dónde estabas? ¡Todos te buscaron!... ¡Todos te necesitaron!, Snif,snif... Mi hermano te necesitó- menciono con tristeza

-¡¿Que le paso a clemont?! ¡¿Porque todo está así?!- preguntó preocupado

Ash estaba desesperado, está situación apocalíptico y que Bonie llorara por su hermano solo le hacía imaginar lo peor

-¡Hey ustedes! Entreguen a sus Pokémons y no les pasará nada-dijo de la nada con autoridad

El misterioso hombre vestía un pantalón negro, una playera de manga larga negra con guantes, botas y una boina del mismo color y en su pecho en rojo se marcaba una R superpuesta con una J

-Bonie quédate atrás- ordenó seriamente
-¡Ash espera, esos tipos son muy fuertes!-exclamo preocupada
-Tranquila... Todo va a salir bien- contesto confiado

Así y sin mediar palabra con el enemigo soltó su pokeball liberando a un Sceptile mientras que el rival sacó un Incineroar

-Es tu última oportunidad, entregarme a esos Pokémons y nada pasará- replicó molesto
-¿Y si no te los quiero dar?- pregunto con confianza
-Entonces se los quitaré a tu cadáver- mucitó con odio

Sacó una pokeball la cuál era negra con rojo y tenía una extraña aura de color morado tirando a negro que apuntó a Incineroar cubriéndolo de esa extraña aura

-Ya veo... Es una pena que forcen a un Pokémon a romper su escencia- menciono seriamente
-¿Que pasa? ¿Tienes miedo? Ahora sí te voy a matar, ¡Incineroar envite ígneo!- exclamó con soberbia
-Sceptile terremoto- contesto tranquilamente

El terremoto alcanzo al tipo fuego antes de siquiera terminar de cargar su movimiento, dejándolo K.O. al instante; pero antes de que pudiera regresarlo a su pokeball Sceptile apareció frente a el en una postura similar a la que tenía el kantoniano

-Liberate- menciono con firmeza

Un brillo apareció en los dedos del tipo planta y la oscuridad de Incineroar salió de su cuerpo como si fueran copos de nieve que desaparecieron en el aire

-¡¿Que le hiciste?!- exclamó sorprendido y furioso
--Nada, solo arregle lo que rompiste... Sceptile falso tortazo- ordenó tranquilamente

El Pokémon volvió a desaparecer y de un golpe a su nuca noqueó al atacante

-Ash... ¿Que fue eso?- preguntó confundida y sorprendida
-Bueno, deberíamos ir a otro lado... Tenemos mucho de que hablar- contestó un poco emocionado
-¡Si!- respondió felizmente

Así ambos viajaron hasta las afueras de la ciudad, más concretamente a la central de Kalos que... También estaba en ruinas, sin duda el escondite perfecto pues resulta que al desplomarse la fábrica termino dejando un hueco lo suficientemente grande para una persona.

-¡Bienvenido a mi hogar!- Exclamó emocionada

El kantoniano solo se le quedó viendo con lástima y confusión, asiendo que ella se deprima un poco

-Bonie, dime ¿Qué paso?, ¿Porque todo está destruido?- dijo con confusión y tristeza
-Quieres saber porque... ¡Porque te largarte Ash! ¡Desapareciste y nos dejaste a nuestra suerte!-exclamo furiosa y desesperada

La chica se derrumbó entre lágrimas y Ash no podía hacer nada, solo aceptar el rencor que le tenía ella y probablemente todo el mundo

-Jovani y su ejército hicieron un ataque global... Todas las ciudades cayeron, las comunicaciones se cortaron, los altos mandos y líderes fueron asesinados... Ahora yo soy de las últimas entrenadoras Pokémon por no decir la última- contesto entre lágrimas con el corazón roto

Lentamente el pelinegro se acercó a la joven y puso su hano en el hombro de la chica.

-Bonie... Yo-
-¿Lo sientes? ¡¿Te arrepientes?! ¡¡¡Eso de nada sirve Ash!!!, ¡¡¡Todos están muertos y nuestro campeón no hizo nada para protegernos!!!
-Perdoname Bonie... Perdoname por haberles fallado a todos- susurro a su oído con lástima

Y así se mantuvieron un buen rato hasta que la chica se calmó

-Ash... Yo lo siento... No quise recriminarte nada... Solo verte... Tan bien, tan feliz, tan en paz... Simplemente pensé...-
-No te preocupes Bonie, entiendo que han pasado por mucho pero ya estoy aquí y haré todo lo posible por salvar a los que queden- interrumpió con firmeza
-Te extrañe mucho Ash- contesto conmovida para luego abrazar al kantoniano

Obviamente regreso el gesto pero fue interrumpido por el ruido de las posadas, alguien había entrado y resultó ser Shauna y Sabino quienes al ver a su amigo desaparecido quedaron paralizados

-Espera... ¿Eres tú verdad?- pregunto emocionada la morena
-Si, por fin lo encontré- respondió emocionada la rubia

Ambas iban a su reencuentro cuando el peliverde adelantó a su compañera y le metió tremendo golpe a Ash en el rostro

-¡¿Que te pasa Sabino?!- exclamaron ambas muy confundidas con el actuar de su amigo
-¡Dónde rayos te habías metido!, ¡¿Acaso sabes todo lo que pasamos?!, ¡¿Porque hasta apenas te dignas a aparecer?!- recriminó con odio

Antes de que pasara a mayores Shauna detuvo al peliverde y Bonie fue a auxiliar a Ash

-¿Estás bien?- preguntó con preocupación
-Si no te preocupes - contesto forzando una sonrisa

Esto no le cayó para nada bien a Sabino.

-¡De que te ríes!, ¡¿Crees que estamos para bromas?!
-No, pero desesperarte solo le quitará la esperanza a los demas- menciono con seguridad mientras se ponía de pie
-¡¡¡Que sabes tu de dar esperanzas!!!

De nueva cuenta intento lanzarse hacia Ash pero Shauna con ayuda de Bonie lograban mantenerlo a raya
-¡Ya cálmate!- Exclamó Shauna
-¡Porfavor Sabino!, ¡Esta no es la manera!- dijo Bonie
-¡¡¡Dejen de apoyar a este fraude!!!- grito furioso a ambas chicas
-¡¡¡Yo no pedí desaparecer!!!- grito con desesperación

Al oír el grito del pelinegro que se había mantenido calmado en todo este tiempo los tres quedaron sorprendidos mientras el kantoniano simplemente se resigno a salir de la fábrica sin escuchar a nada ni a nadie. Bonie lo siguió hasta unos escombros que apuntaban directo a Luminalia y en donde Ash se encontraba sentado observando los restos de la ciudad.

-Disculpalo... Todo esto ha puesto tensos a todo, en especial a Sabino con su hijo- menciono con arrepentimiento
-Asi que el y Shauna... Si que paso tiempo- contesto con tristeza
-Si pudiera saber... ¿Dónde estuviste todo este tiempo?- pregunto con seriedad
-Estuve con los legendarios, ellos me llamaron para prepararme para algo- dijo con seriedad sin dejar de mirar a Luminalia
- ¿A prepararte para que?-replico confundida
-Para vencer a los legendarios- contesto con seriedad
-¿A que te refieres? Menciono sorprendida
-Casi todos los legendarios forman parte del equipo de Jovani gracias a la escencia oscura-
-Asi se llama esa extraña aura- mucitó pensativa
-Si... Para eso necesito tu ayuda y la de todos, necesito recuperar a la gente, si sabes algo ¡Dímelo por favor!- exclamó desesperado

Al escuchar esto Bonie se emociono, acaso es posible que todavía exista esperanza, tal vez su hermano tenía razón.
-Te ayudaré con dos condiciónes, 1. Deberemos llevar a Shauna y Sabino a un refugio seguro y 2. Yo te acompañaré en el viaje- exclamó con una enorme sonrisa
- Bien, tenemos un trato Bonie

Así en el atardecer y frente a lo que alguna vez fue el hogar de unos de sus amigos Ash empezaría un nuevo viaje para salvar el mundo junto a su primer aliada.

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