Nassau

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La reencarnación es un concepto que muchos añoran y desean hacer realidad, otros no la quieren o son escépticos al comienzo, pero claro, tener sueños tan vívidos de alguien que nunca has visto y sentirse realmente deprimido al despertar te hace creer que, quizá, es posible.

Kim Minjeong, ella no creía en esas cosas, a pesar de que su fe lo promueve en cada sermón, como una esperanza a nuevas oportunidades y experiencias; la reencarnación como una forma de aprender errores y que el alma ascienda a los cielos, básicamente. Pero desde que cumplió 13 años ha visto el rostro de una mujer en sus sueños. Esa mujer se dirigía a ella como "él" como "esposo", asumió; es su esposa, esa mujer de sus sueños se trata de una esposa que tuvo.

Katarina.

Ese es el nombre. La primera vez que lo escuchó sintió su corazón acelerarse con anhelación, cuando despertó se quedó casi una hora sentada abrazando sus rodillas mientras el nombre se repetía como un mantra en su cabeza. Eso fue a sus 15 años.

Era un nombre católico.
Lo preguntó de la nada mientras desayunaba junto a sus padres y hermano, los 3 la miraron extraño un momento antes de que su padre lo cuestionara.

-¿Katarina? -el señor Kim retiró sus gafas de lectura dejando el diario en su regazo- Es un nombre católico, suelen usarlo en bautizos. Pero no, no tenemos algún familiar con ese nombre, ¿por qué preguntas?

Minjeong tomó un trago largo de jugo mientras su hermano fruncía su ceño a su lado-. Por nada, me pareció lindo -otra vez, miradas extrañas. Dejó el vaso y dio una mirada vacilante a su padre-. Tal vez así le ponga a mi hija, solo me gustó.

Los Kim sonrieron extrañados, pero no lo cuestionaron. No es como si Minjeong no dijera cosas extrañas como a sus 6 años donde juraba que había visto un alien (era su hermano disfrazado para asustarla.)

Pronto comenzó a tratar de olvidar el tema. Katarina seguía allí, claro, pero ya no le importaba como antes.

Y luego entró de aprendiz a SM, le gustaba mucho el concepto de los grupos de allí y soñó con hacer sentir felices a las personas como su grupo favorito lo hizo con ella. Hasta ese entonces todo estaba muy bien, pero en medio de sus prácticas se encontró con otra aprendiz con quien nunca había hablado; Yoo Jimin.

-Hermosa...

Jimin parpadeó confundida-. ¿Dijiste algo?

En sus 16 años nunca se había avergonzado tan rápido como ahora.

-¡N-no! Estaba balbuceando, lo siento Yoo-nim.

Jimin era una aprendiz prodigio, por lo tanto, MinJeong sentía esa necesidad de respeto al referirse a ella. Pero cuando su mayor se sonrojó y dio puñetazos al aire, sintió un poco de esa brecha de posiciones (absurdas) desaparecer.

-¡Solo Jimin, por favor! Nos llevamos un año de diferencia.

-P-pero sigues siendo mayor que yo...

-Entonces dime unnie.

Fue divertido. Y cuando Minjeong tocó su mano en un apretón sintió un cosquilleo recorrerla, sonrió nerviosa mientras Jimin le sonreía de lado casi cerrando sus ojos, era tierna. Se sintió como en casa, fue extraño y agradable al mismo tiempo.

No tardaron en convertirse en Jiminjeong, no existía una sin la otra. Eran inseparables, incluso los padres de ambas conocían a la otra, y el momento en que Minjeong notó al extraño entre ambas fue cuando se quedó a solas con Jimin practicando.

Ella solo se sentó a observarla bailar, era hipnotico, Jimin cada vez hacía ver esa coreografía de Girls Generation tan fácil. Era lo suyo.

Cuando en una vuelta sus miradas se conectaron y Jimin le sonrió coquetamente, MinJeong rasguñó el suelo de madera debajo de ella.
Pudo sentir su corazón acelerarse y un deseo inexplicable nacer de ella.

Nassau || WinRina (OneShot).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora