14: Can't resist

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La pelinegra se separó del beso luego de unos pocos minutos, las mejillas de ambas estaban rojas y sus respiraciones levemente aceleradas, no había sido un beso intenso así que no se agitaron en el proceso. Jiu agachó la mirada unos segundos antes de que sus labios fueran nuevamente atrapados por los de Rosé, sus manos sostuvieron con firmeza la cintura de Minji para mantenerla cerca de su cuerpo.

La pelinegra dejó escapar un gemido ahogado entre el beso, mandando pequeñas vibraciones a la boca de la albina que deseaba más, Rosé pidió permiso para llegar más lejos y el beso se profundizó, sus lenguas se entrelazaban perfectamente y sus cuerpos se pegaron más si es que era posible, Minji terminó sentada sobre el escritorio de la albina sin dejar de besarse, sus piernas le rodearon la cintura para mantenerla cerca, al mismo tiempo que acariciaba su rostro con su mano buena.

Por un instante pensó en Yoohyeon, lo que le hizo después de haber confiado en ella no tenía perdón, pero no besaba a Rosé por despecho, lo hacía porque todo su cuerpo buscaba estar cerca de ella, no era capaz de resistir ese inexplicable deseo.

Leves golpes en la puerta hicieron que se detuvieran obligatoriamente, respirando más agitadas y uniendo sus frentes con suavidad.

Sra.Park: Hija, te traje unas mantas extras para ti y Jiu.

Los ojos de Rosé se habían oscurecido un poco más debido a lo que hacían hace unos segundos, su mirada fija en los ojos de Minji antes de responderle a su madre.

RS: Ya voy Omma.

Dió un suave piquito en los labios de Jiu y le ayudó a bajar del escritorio, luego se acercó a la puerta y abrió para recibir las mantas, su madre también le entregó algunas galletas para que compartieran y les deseó la buenas noches.

RS: ¿Q-quieres galletas?

La pelinegra negó lentamente mientras jugaba con sus dedos, sus mejillas aún estaban rojas y su cuerpo se sentía cálido, Rosé dejó las galletas sobre el escritorio y acomodó las mantas en la cama, luego recibió de forma sorpresiva un abrazó por parte de Minji que dió pequeños besos en su mejilla.

MJ: Cuéntame que hiciste durante esos 7 años.

RS: ¿En serio quieres saber?

MJ: Por supuesto.

Rosé sonrió alegre antes de compartir otro beso corto con Minji, primero le dijo que se pusiera un pijama que le daría, Rosé fue al baño para cambiarse, dejando a la pelinegra sola en la habitación para que se vistiera con tranquilidad, a pesar de que ese mismo día la vió desnuda en las duchas de la escuela.

La pelinegra se cambió y decidió quitarse las lentillas, guardando estas en su mochila para no perderlas, luego se vió en la pantalla de su celular con atención, se había acostumbrado un poco a la rareza de sus ojos, sin embargo aún le perturbaba las cosas que podría llegar a hacer con esa gran cantidad de poder.

RS: Mi madre envió más galletas, aún sabe cuales son tus favoritas.

MJ: Sus galletas siempre fueron mis favoritas...

Minji la miró con una pequeña sonrisa, haciendo que Rosé la viera con impresión tras encontrarse con aquella mirada azulada, haciendo que tirara sin querer la bandeja con galletas, por suerte Minji estiró la mano y su mismo poder evitó que tocaran el suelo, dejandola junto a la otra en el escritorio.

MJ: Ten cuidado.

RS: W-wow...te has vuelto más poderosa.

MJ: Sí...me da algo de miedo.

Winter and Summer//JiyooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora