una ofrenda para el Dios

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‐Las aguas agitadas, las tormentas despiadadas, la falta de peces en el océano, hacia que la vida de aquella pequeña aldea se viera amenazada,
Todos los días le llevaban pequeñas ofrendas a poseidon el dios de los océanos.

El gefe de la aldea ya no sabia que más hacer. Habían intentado darle a las chicas más hermosas de su aldea pero tal parece que el dios se había ofendido.

Esa tarde nuevamente abría una asamblea para planear que hacer, la situación no podía seguir así.

Mientras tanto aquella hermosa mujer caminaba por las orillas de la agitada playa, Tn era muy hermosa, su belleza parecía casi irreal, la pequeña mujer de pelo plateado como lluvia de luna y esos ojos azules que competían con el hermoso océano caminaba haciendo plegarias para que las aguas se calmaran y hubiera una pesca abundante.

Escucho el sonido de un animal herido y se acerco a las rocas, no le importo mojarse, las olas casi la arrastraban pero ella soportaba, había un pequeño delfín el cual había encayado lastimandose una aleta.

La chica se acercó y poso su mano en el pequeño delfín y curo sus heridas.

«Debes irte antes de que te vean, será nuestro secreto, si mi padre se entera de mi poder, me venderá ala  primera oportunidad »

Poseidon veía a lo lejos a esa hermosa humana, no era la primera vez que la veía en su reino, además los animales le contaban de ella, ya había sanado a varios de ellos.

El monarca veía lo hermosamente irreal que era la chica.

Al llegar a su pequeña cabaña su padre y madre la estaban esperando.

Su madre estaba llorando mientras su hermana tenía una sonrisa socarrona en su cara.

Sin decir nada su padre la tomó entre sus brazos y la amarro de manos y pies

La saco de la cabaña y la llevo al templo de aquel dios.
Tn no podía creer lo que estaban haciendo, planeaban darla como ofrenda a aquel dios?

La gente la miraba y agachaba la cabeza, había gente a la que tn siempre ayudaba, y así le pagaban, unas mujeres la arreglaron, la bañaron con aceites aromáticos y peinaron su cabello, le pusieron un vestido blanco y una corona de rosas del mismo color.

-Si regresas y no a mejorado la situación no serás admitida en casa, debes pagarme estos 18 años por mantenerte, al menos sirve de algo huérfana estúpida

Las lagrimas de tn rodaban por sus mejillas, las mujeres no la miraban a los ojos, la cubrieron con una tela de seda amarrando sus pies y manos, tapando también sus ojos.

«Lo siento tn, lo hago por mi familia»

Escuchaba las disculpas de las mujeres mientras las escuchaba irse, después del miedo y las ganas de llorar habían pasado las horas, la chica tenía frío, ese ligero vestido sumado a la playa hacia más fresco el lugar.

Escucho el agua correr y sus músculos se tensaron escuchaba los pasos en la arena y sentía que su corazón saldría de su pecho.

-Tch.. otra mujer, que no saben esos humanos idiotas que no me importan sus asquerosas mujerzuelas.

Poseidon se quedo callado al reconocer ese cabello, solo había alguien que tenía el pelo plateado en esa aldea.

Podía ver los vestigios de las lagrimas de la chica. No lo iba a negar era hermosa, pero era humana. Bueno semi humana... aun así no podía acostarse con una humana solo pensarlo le causaba repulsión.

Pero una sonrisa retorcida apareció en su rostro al ver la nota de dicha ofrenda,

«Acepte esta ofrenda y escuche nuestras plegarias. Una mujer pura y hermosa es lo que se merece un dios»

Una ofrenda para el dios de los océanos.« poseidon x tn»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora