El nuevo hotel Hazbin! (version español)

La radio mira

(recuerden que el espanol no es el idioma original por lo que me encantaria que me abisen si hay errores de ortografia)

Lucifer había comenzado a entender a Adam de maneras que nunca esperó. Después del emotivo reencuentro con su hijo, Lucifer sabía que no podía simplemente dejar a Adam ahogarse en la oscuridad que lo rodeaba.

Así que, antes de salir de la habitación, dejó algo que Adam solía amar cuando vivían en el Edén: una pequeña arpa que Lucifer había hecho para él durante aquellos días inocentes y armoniosos."Aquí tienes, Adam... esto te ayudará a pasar el tiempo", dijo Lucifer suavemente, colocando el arpa en una mesa cercana antes de sellar la puerta.Adam la miró y esbozó una leve sonrisa."Gracias, Sam..."Lucifer se congeló por un momento al escuchar eso, pero logró sonreír."Volveré pronto."Adam miró el arpa con una mezcla de nostalgia y alivio.Aunque estaba atrapado, al menos tenía algo que le recordaba tiempos más simples y felices, cuando la música que fluía de sus dedos podía llenar el Edén con dulces y suaves melodías.Mientras Lucifer se alejaba, su mente seguía enredada en pensamientos sobre Adam, pero de repente fue interrumpido al llegar al vestíbulo. 

Alastor estaba allí, esperándolo con su habitual sonrisa cortés, una máscara de amabilidad que ocultaba sus verdaderas intenciones.

Lo que Lucifer no notó fue la sombra de Alastor, un reflejo oscuro y retorcido que parecía moverse con vida propia, casi rozando el borde del aura de Lucifer mientras pasaba."Lucifer", dijo Alastor con su voz perfectamente modulada, casi antinaturalmente formal."Parece que el sueño no es tu amigo esta noche. ¿Qué te mantiene despierto a esta hora tan poco santa?"Lucifer no se detuvo, pero no pudo ignorar la presencia de Alastor."Tengo asuntos que atender, Alastor", respondió con una neutralidad calculada."Nada de lo que debas preocuparte. Y, por cierto, nunca te di el derecho de hablarme con tanta familiaridad. Para ti, no soy Lucifer; soy tu Rey", agregó, calmado pero visiblemente molesto.Alastor se acercó con esa gracia inquietante suya, cada paso medido con precisión.A medida que lo hacía, su sombra se deslizaba hacia adelante, acercándose aún más a Lucifer, casi como si intentara alcanzarlo por dentro."¿Hmm? Mis disculpas, Rey. Y, en realidad, todo lo que concierne a este hotel me concierne a mí también", respondió suavemente, manteniendo su tono elegante pero afilado."Y cuando el Rey deambula por los pasillos a estas horas, es natural que despierte mi curiosidad."Lucifer finalmente se detuvo, girándose para enfrentar a Alastor. Mientras lo hacía, algo en el tono y la actitud de Alastor le recordó a alguien.Esa amabilidad manipuladora, ese constante juego de palabras envuelto en una cortesía impecable... Se sentía casi familiar, como una sombra del pasado que preferiría olvidar."Tu curiosidad podría llevarte a lugares peligrosos", advirtió Lucifer, su voz portando una amenaza implícita, palabras que había escuchado de alguien cercano antes."Oh, no me malinterpretes", dijo Alastor con una sonrisa que apenas tocaba sus ojos. Mientras hablaba, su sombra se atrevía a acercarse aún más a Lucifer, extendiendo sus dedos oscuros hacia él. Pero Alastor se dio cuenta y, con un ligero movimiento de su mano, la sombra retrocedió, casi como un niño siendo regañado."No tengo intención de invadir tu privacidad, Rey. Pero debo admitir que me intriga lo que podría estar pasando por tu mente. Siempre tan misterioso, tan... reservado."Lucifer mantuvo su mirada fija en Alastor, plenamente consciente de que este intercambio era más que una simple charla.Alastor era astuto, manipulador, y Lucifer lo sabía."Aquí no hay nada que puedas manipular, Alastor. Así que ahórrate el esfuerzo."Alastor rió suavemente, una risa sin alegría, y dio un paso atrás, dándole a Lucifer algo de espacio."No te preocupes, Rey. No soy lo suficientemente audaz como para intentar manipular al mismo Rey del Infierno. Mi única preocupación es proteger a Charlie, asegurarme de que esté en buenas manos. Estoy aquí por ella."Lucifer frunció el ceño, captando la sutileza de la falsedad en las palabras de Alastor."Charlie está fuera de tus límites, Alastor", respondió Lucifer con firme advertencia en su tono.Alastor inclinó ligeramente la cabeza, manteniendo su sonrisa."Por supuesto, Rey. Mi lealtad hacia ella es genuina. Solo quiero lo mejor para nuestra querida Charlie."Con esas palabras, Alastor se desvaneció en las sombras, llevándose consigo su enigmática oscuridad, pero no sin antes lanzar una última mirada a su sombra, como recordándole su lugar.Lucifer se quedó solo en el vestíbulo, sabiendo que la batalla por Charlie apenas había comenzado. Pero, en el fondo, no podía sacudirse la sensación de por qué ese estilo tan familiar de Alastor lo inquietaba tanto.

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