Después de un largo momento de silencio por ambos pilares Sanemi decidió hablar nuevamente.
-¿Podemos intentar ser amigos?
Pregunto con sutileza el de ojos púrpuras quien miraba expectante a su acompañante.
-¿Amigos?
Cuestionó al borde la locura el de ojos azules. Giyu no sabía que responder ante tal petición, su corazón gritaba de emoción mientras que su cerebro le decía que había algo raro en todo eso.
-Bueno, si eso te incómoda no tienes porque aceptar
Explico con algo de paranoia el albino ya que no quería asustar a Giyu.
-Si, lo que quiero decir es que supongo que no hay problema con eso
Dijo el de ojos azules mientras esbozaba una pequeña sonrisa que no fue pasada por alto por Sanemi.
-Me alegra que hallas aceptado mi petición. Bueno, ahora me tengo que retirar pero espero vernos pronto
Se despidió con amabilidad el de ojos púrpuras mientras se ponía de pie.
-Esta bien, espero que te valla bien. Hasta luego Sanemi
Correspondió cordialmente a la despedida de su ahora amigo. Mientras acompañaba a Sanemi hasta la salida de su finca.
Después de que el albino se marchara el de ojos azules corrió rápidamente hasta su habitación donde cerro la puerta rápidamente y se arrojó hacia su cama para después gritar de alegría.
-No puedo creer que esto finalmente ese pasando
Giyu se decía a si mismo para después tomar una almohada y cubrir su rostro con esta.
-¿Que es lo que finalmente esta pasando?
Cuesntiono una voz desde el marco de la puerta de su habitación.
-Karl, ¿Hace cuanto que estas ahí?
Pregunto con un poco de vergüenza en su rostro el de ojos azules. Giyu realmente esperaba que su amigo no lo hubiera visto gritar como una chiquilla enamorada.
-No hace mucho, de hecho acabo de llegar
Explicó Kokushibo mientras se acercaba a la cama del menor para después sentarse en la orilla de esta.
-Creí que te habías marchado, ¿Porque regresaste?
Cuestionó con curiosidad el ojos azules ya qué si mal no recordaba casi corrió a su amigo durante la mañana.
-Ya esta anocheciendo y me preocupe porque probablemente no has comido nada en todo el día así que te traje un poco de salmón con daikon
Respondió con calma el de múltiples ojos mientras le mostraba al de ojos azules una bandeja con comida.
-Karl, gracias por preocuparte por mi eres el mejor amigo que podría tener
Dijo con gratitud el de ojos azules para después darle un abrazo a su amigo.
-Pero bueno, no respondiste mi primera pregunta
Recalcó el de múltiples ojos mientras miaraba a su amigo expectante por su respuesta.
-Karl creo que el amor me esta volviendo un poco loco
Soltó finalmente el de ojos azules con una completa cara de enamorado, que hasta se podían ver corazones en sus ojos.
-¿Porque dices eso?
Pregunto con curiosidad el mayor ya que esa misma mañana el de ojos azules esta hecho pedazos y ahora parecía una chiquilla enamorada. Kokishibo no entendía que tanto había sucedido durante su ausencia.
-Después de que tu te marchaste Sanemi vino a hablar conmigo, él se disculpó y me pidió que fuéramos amigos
Contó con emoción el de ojos azules mientras liberaba a su amigo del abrazo para después comenzar a comer su comida favorita.
-¿Realmente eso paso durante mi ausencia?
Cuestionó sorprendido el de múltiples ojos. Kokushibo no creía que tan rápido hubiera sucedido todo eso pero aún así le alegraba ver a su amigo feliz.
-umju, es increíble verdad
Respondió con la boca llena el de ojos azules.
-Si que lo és
Expresó Kokushibo, para después quedarse perdido mirando a algún punto vacío en aquella habitación.
Cuando el de ojos azules esta por decir algo nuevamente este fue interrumpido por una voz que lo estaba llamado.
-Giyu, te encuentras en casa!
Gritaba una voz desde fuera de la finca del de ojos azules.
-Esa el la voz de Iguro, me pregunto qué lo traerá por aquí a estas horas
Se pregunto Giyu. Algunas veces el joven de ojos heteromáticos iba a visitarlo más nunca a esas horas de la noche.
-Voy a ver que necesita tu quédate aquí por lo mientras
Le dijo el de ojos azules a su amigo para después salir a ver que era lo que sucedía.
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