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Azul___

Hoy me desperté un poco tarde, como siempre. El sol ya estaba bien alto cuando abrí los ojos, y mi despertador parecía haber decidido que era un buen momento para tomar unas vacaciones. Me levanté rápidamente y me metí en la ducha. El agua caliente me hizo sentir viva y lista para el día.

Al salir, decidí que no quería complicarme con la ropa. Así que elegí unos shorts cómodos y un top café de tirantes. Quería sentirme fresca y a gusto, ya que solo tendría dos horas de clases. Mientras me peinaba, decidí hacerme unas pequeñas ondas en las puntas de mi cabello; me encanta cómo se ven.

No quería perder mucho tiempo en el maquillaje, así que solo apliqué un poco de corrector para las ojeras, rímel para mis pestañas y un toque de gloss en los labios. ¡Listo! Me miré al espejo y pensé que estaba bien para salir.

Bajé las escaleras con una sonrisa y saludé a mis padres. "¡Buenos días!", dije con alegría. Ellos me respondieron con sonrisas, y eso siempre me hace sentir bien.

-Che, papá, ¿Alan va a venir a estudiar hoy? —le pregunté mientras me servía un vaso de jugo en la cocina.

-No, hija, no va a poder ir. Tiene que ir a buscar algunas cosas —me respondió, mirando su móvil

-¿Por qué? —le tiré, curiosa.

-Porque tiene unos pendientes que no puede dejar pasar y después irá a entrenas—dijo mi viejo con una sonrisa.

-Ah, ok. —respondí, entendiendo lo que decía.

-Escuchame, pa, hoy salgo temprano. Solo tengo dos horas de clases —le comenté mientras terminaba el desayuno.

-Todo bien. Cuando salgas, llamame y paso a buscarte —me dijo con un guiño.

-¡De una! —asentí con entusiasmo.

Después de eso, subimos a la camioneta y nos fuimos hacia la escuela. El viaje fue rápido y divertido; me encantaba pasar tiempo con él.

Al llegar, miré el reloj y vi que todavía me quedaban 20 minutos libres antes de que empezaran las clases. No podía irme aún, así que decidí sentarme en un banco cerca de la entrada. Mis amigos se sumaron y empezamos a charlar. De repente, vi que alguien se acercaba: era Liam, el primo de Lucas.

-¡Hola! —saludó Liam con una sonrisa copada.

-¡Hola! —contestamos todos al unísono.

-Che, me olvidé de presentarme. Soy Liam, el primo de Lucas —dijo él, estirando la mano con una sonrisa.

-Ah, hola! Yo soy Azul. —le respondí, dándole la mano y sintiendo que había buena onda.

-¿Sos nueva en la escuela? —me preguntó, con curiosidad.

-No tanto, ya llevo un par de días. Pero todavía me estoy acostumbrando. ¿Y vos? ¿Siempre venís a esta escuela? —le devolví la pregunta.

-Sí, toda la vida. Pero nunca había tenido el gusto de conocerte. —me dijo con un tono un poco coqueto—. ¿De dónde sos?

-Soy de acá, pero mi familia se mudó hace poco. ¿Y vos?

-Yo soy de acá también. ¡Así que somos vecinos! —dijo sonriendo—. Me parece que tenemos que hacer un plan y salir a conocer el lugar.

-¿En serio? Eso podría estar buenísimo. —dije, sintiendo que la charla se ponía cada vez más interesante.

-Sí, claro. Prometo que te voy a mostrar los mejores lugares para comer y pasarla bien. —Liam me miró a los ojos y sonrió de una manera que me hizo sentir un poco nerviosa.

Quiero volver a conocerte [Javon Walton]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora