Explicit Content. (Adaptación Railo)

Parte 5

Rai se mordió el labio, moviéndose de nuevo. Sus bragas estaban absolutamente empapadas y estaba empezando a preocuparse de estar arruinando el sofá también. Robándole una mirada a Alondra para asegurarse de que su atención esté fija en la pantalla, pasó la mano entre sus piernas para asegurarse. El sofá estaba todavía seguro, pero sus muslos estaban mojados ahora también. Enderezándose Rai cruzó las piernas con la esperanza de ocultar su excitación.

Alondra se había fijado en el movimiento de Rai por la esquina de su ojo. Vió como Rai pasó la mano entre sus muslos y vio qué estaba mojada. Ahogó un gemido, volviendo su atención a la televisión. El corazón le latía salvajemente en el pecho.

-Oh, mierda. Ahí mismo, ahí Valeria -Natalia gimió. Tenía las piernas a cada lado de la cabeza de Valeria y su espalda se arqueó. La única parte de la cabeza de Valeria que se podía ver su la lengua lamiendo el sexo de Natalia.

-¡Mierda sí! Eres buena putita Valeria -Natalia arremolinaba sus caderas, conduciendo sus pliegues sobre los labios de Valeria.

Las manos de Valeria estaban apretando la cabecera, conteniendo el aliento antes de que Natalia se sentara, dándole un momento para respirar.Rai se quedó sin aliento.

-Oh

Alondra volvió a analizar a Rai.

Estaba sonrojada, respirando con dificultad, y ahora se retorcia constantemente. Estaba claro que estaba totalmente excitada y con necesidad de un poco de alivio.

-¿Estás bien Rai?

-Yo... yo creo que mi pulso se ha elevado y que estoy experimentando hipersensibilidad ante los eventos que están sucediendo en la... en la pantalla

Rai no estaba segura de si lo que decía tenía sentido. Ya no era capaz de completar una oración. Toda su atención se centraba en los latidos de su centro y la humedad absorbiendo sus bragas.

Alondra se sonrojó al decir esto, pero llevaba su famosa sonrisa.

-¿Sabes si tienes que... eh? que masturbarte... puedes hacerlo si quieres. Yo no te juzgaré ni nada

Alondra se encogió de hombros como si fuera normal ver porno con su mejor amiga mientras se masturbaba.

Rai miró a Alondra. Un fuerte gemido de la pantalla y la imagen de Natalia moviéndose hacia abajo sobre la cara de Valeria borraron su mente, bajó una pierna al suelo y dejó la otra doblada en el sofá. Alondra trago saliva. Cuando le había sugerido esto a Rai, había tenido la intención de que Rai permanezca sentada.

Nunca espero que Rai le dé una visión clara de su ropa interior empapada.

-Mierda... mierda... no pares Valeria -Natalia estaba obviamente cerca de alcanzar el climax.

-¡Oh mi dios... sí! -sin embargo, fue el ruidoso gemido de Rai el que capturó toda la atención de Alondra. Rai había deslizado su mano hacia abajo en sus bragas y Alondra podía ver el ligero movimiento de sus dedos mientras estos bailaban alrededor de sus pliegues.

La cabeza de Rai se volteo para mirar la pantalla y su estómago se ondulaba con el esfuerzo controlado para no meterse los dedos en el coño. Alondra no podía apartar los ojos. Sabia que estaba mal, pero la televisión no tenía nada en comparación a ver a Rai masturbarse. Era erótico, sensual, e igual que cada uno de los sueños húmedos de Alondra.

-Rai... -Alondra exhaló su nombre, sus ojos de color negro oscuro ahora. Rai puso su atención en Alondra.

Podía ver como Alondra no apartaba su vista de la mano dentro de sus bragas y respiró hondo para no gemir.

-Dime

-No puedo dejar de verte -Alondra admitió. El sexo, la lujuria y la excitación habían inundado su vergüenza- Dime que me detenga

Rai negó con la cabeza.

-No quiero que te detengas -fue entonces que los ojos de Alondra capturaron los de Rai- Quiero que me mires Alo. Me pongo demasiado caliente cuando me miras

-Está bien -Alondra asintió en silencio.

Su mirada oscura aterrizó de nuevo en el centro de Rai.

Rai notó que Alondra la veía, sintiéndose increíblemente sexy y traviesa. Era una la combinación pecadora y sabía que no iba a durar mucho más tiempo. Deslizo dos de sus dedos dentro de su coño y gimió fuertemente.

-Si... oh, Dios mío... Uhhh

La televisión se había ido a otra pausa comercial, pero nadie se había dado cuenta. Alondra podía decir que Rai estaba bailando al borde de su orgasmo.

-Vamos, córrete Rai -Alondra dijo con voz áspera.

Sus pupilas dilatadas se dirigieron a Alondra cuando su orgasmo se estrelló contra ella. Metiendo sus dedos dentro y fuera rápidamente, Rai se corrió, arqueando la espalda gritando de placer. Su cuerpo se estremeció antes de aterrizar de nuevo en el sofá, respirando pesadamente.

Tragando saliva lentamente Rai deslizó sus dedos temblorosamente fuera de sus bragas. La atención de Alondra se sintió atraída por ellos, queriendo probarios.

Rai miró a Alondra, con los ojos abiertos. Ahora que su excitación estaba más controlada se dio cuenta de lo que acababa de hacer. Buscó cualquier signo de arrepentimiento o vergüenza.

-Yo... -Rai se sonrojó.

Alondra sonrió, Nunca había visto a Rai avergonzada antes.

-Eso fue lo más caliente que he visto en mi vida Rai. No sabía que tenías un punto de excitación al ser observada

-Gayness -Rai sonrió, sabía que Alondra estaba tomándole el pelo- Sólo contigo

Alondra asintió, al no ser capaz de mantener su mirada lejos de sus dedos. Entendiendo, Rai deslizó la mano por su cuerpo hasta llegar a su boca, chupando sus dedos. Hizo todo un espectáculo lamiendo sus dedos hasta limpiarlos y sacarlos de su boca, Alondra gimió bajo, aprobando lo que vio.

-Jesús -Alondra se quedó sin aliento, tuvo que apretar sus puños para mantener la calma.

Rai se rió, una risa gutural que hizo que Alondra se moje aún más de lo que ya estaba.

-¿Quieres probarlos Alo?

-Yo... nosotras, nosotras no podemos...

Alondra balbuceó atrapada con la guardia baja. Esta fue la reacción que Rai había esperado. Poco a poco empujándose a sí misma a una posición sentada junto a Alondra inclinó su barbilla para mirarla.

-Estoy bastante segura de que cruzamos la línea a principios de esta noche y no tengo ninguna intención de volver -Rai la miró a los ojos.

Alondra le imitó, antes de que sus ojos cayeran a mirar a los labios carnosos de Rai.

-Voy a besarte ahora -levantó la mano para detener la respuesta de Rai- Y luego vamos a ver el resto de este documental porque esta jodidamente caliente...

-Ese lenguaje -Rai interrumpió, sonriendo tontamente.

-Y entonces... -Alondra siguió con una sonrisa- Voy a follarte en cada rincón del apartamento

Rai se estremeció ante el reto, aun sabiendo que podría ser imposible en una sola noche, Alondra interrumpió sus pensamientos al estrellar sus labios contra los de ella en un ya esperado beso.