𝗣𝗮𝗽𝗮́ 𝘀𝗼𝗹𝘁𝗲𝗿𝗼 | 𝐂𝐇𝐀𝐍𝐌𝐈𝐍

;; 𝐕𝐄𝐈𝐍𝐓𝐈𝐒𝐈𝐄𝐓𝐄

—¿Qué somos? —preguntó el menor, la luz estaba apagada y Jake dormía en medio como todas las noches.

—No somos nada Christopher —le dijo Seungmin sin despegar la vista del pelinegro—. No podemos ser nada, cualquier cosa entre nosotros repercutirá en Jake, si llegamos a pelear, si no funciona.

—Entonces haremos que funcione.

—No es tan fácil —le dijo tomando su mano—. A ti te gustan las mujeres, no eres como yo.

—También me gustas tú —le dijo provocando un sonrojo en el mayor que no fue perfectible por la falta de luz.

—No funcionará, lo sabes, lo arruinaremos. Con Jake estamos bien así, debemos parar, no más roces, no más besos.

Chris asintió—. Si así lo quieres, solo un último beso —pidió y Seungmin asintió acercándose a él.

Sus labios se juntaron de nuevo y se movieron suavemente, cuando se separaron se vieron a los ojos y sonrieron.

—Tal vez otro más —pidió Chan y Kim no pudo decirle que no, de nuevo sus labios se movían sobre los contrarios negándose a separarse solo hasta que faltaba el aire.

—No creo que pueda ser el último —admitió Seungmin antes de besarle—. Esto no funcionar...

Christopher volvió a besarlo, Seungmin gimió bajito separándose y volviendo a besarlo.

Jake se removió en la cama y terminaron separándose con los labios hinchados y mejillas calientes.

—Lo intentaremos, si no funciona tenemos que prometer que no afectará a Jake.

Kim asintió—. ¿Otro más?

—Sí.