Agilizando la situación.

25 1 0
                                    

Lunes.

La noche de antes, habían compartido unos cuantos mensajes Bea y Violeta avisándole de la hora en la que tenía para empezar su primer dia de prueba, a las 9:15, la misma hora que había sido citada Chiara.

Ambas estaban nerviosas, unos nervios que ellas no sabian, compartían. Una con unos nervios propios de un primer dia, nerviosa por caer bien a sus proximos compañeros de trabajo, ansiosa por ver como se envuelve en su nueva vida durante unos meses. Otra nerviosa por conocer a su proxima compañera de esa semana, rezando porque no haga todo más complicado de lo que a ella le parece ahora mismo.

Violeta se había despertado ese dia a las 7:30. Bueno, se había levantado de la cama, porque no habia parado de dar vueltas en ella durante unas horas casi sin poder dormir, asique se levantó esperando que las ojeras que tenía no fueran dificiles de tapar con maquillaje. Desayunó sola intentando no hacer ruido para no despertar a su amiga, y se metió en el baño para asearse y vestirse

Algo con lo que contaba Violeta y se había imaginado, era que tendría que llevar uniforme para trabajar, por lo que antes de irse de Granada le habia preguntado a Denna más o menos la ropa que tenía que llevar, y el día de antes Bea se lo había confirmado. Los camareros llevaban un pantalón de traje negro, con unos zapatos negros, y lo que diferenciaban a la barra con los camareros del comedor, era la camisa. Los de comedor llevaban una camisa blanca con una corbata negra, y los de barra una camisa negra sin ningún accesorio, ya que molestaba a la hora de manipular directamente las bebidas y las tapas más rápidas que iban saliendo.

Ya podrían dejar que me ponga algo, asi solo está muy soso

Aun así, Violeta se puso unos pendientes y su anillo preferido, cogió su bolso con las llaves, cosas varias y salió cuando ya eran las 8:30

Sabía que iba con tiempo de sobra, ya que había calculado que su apartamento del trabajo estaba a media hora de distancia, por lo que ella ya había decidido que para no perder una costumbre que le gustaba, todas las veces que pudiera le gustaria ir andando al trabajo. No habia un plan que le gustara tanto como ir por unas calles que esconden tantas cosas y descubrirlas con unos auriculares mientras escuchaba alguna de sus playlist favoritas.

Por eso al llegar al trabajo a las 9, y viendo que aun le quedaban casi 15 minutos para entrar, decidió esperar en la calle de enfrente al restaurante y sacar un cigarro para matar el tiempo, y los nervios. Esta quizás era una costumbre que le gustaba mucho menos que la anterior, pero tambien era una que le costaba el doble dejar. Solo sabe que desde hace unos años habia sido una via de escape a esa ansiedad que le rodeaba. Sí, ella también admitia que sonaba un poco a cliché, pero no por ello era menos cierto. Es eso que sabes que está mal pero no puedes dejarlo para sorpresa de nadie.


A unos pocos metros de distancia se acercaba Chiara andando igual que la granaína, con sus cascos a tope reproduciendo su playlist de junio a medio hacer. Tarareaba una canción de su cantante favorito en ese momento de su vida cuando se hicieron las 9:10 y decidió abrir el restaurante, esperando a que llegara su próxima compañera, intentando parecer segura de sus acciones pero la realidad era que seguía igual de nerviosa que el dia anterior.

Chiara tenía muy claro que una de las cosas que no puede soportar en la vida es que la traten de tonta, quizás por su personalidad más alegre y nerviosa muchas veces las persona habían caido por tratarla como una chica infantil e inmadura. Tras muchos tropiezos de realidad por esta razón, no le parecia del todo cómodo conocer gente nueva que sabía que iba a tener que ver a menudo. No le molestaba para nada por ejemplo conocer a alguien de fiesta, hablar con un dependiente en una tienda, o incluso con un amigo de un amigo, porque sabía que pocas veces en la vida iban a volverse a ver. Pero la cosa cambiaba cuando la rutina se metia en medio haciendo que tuviera que compartir espacio frecuentemente con más gente.

MUAH | KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora