Entre Susurros y Estrellas: El Destino de Dos Corazones

Parte 2: Ecos del Corazón

Los días después de su primer encuentro bajo las estrellas pasaron como una serie de momentos borrosos para Jimin y Jungkook. Aunque ambos regresaron a sus vidas y rutinas habituales, la conversación nocturna seguía resonando en sus pensamientos, como un eco persistente que no podía ignorarse.

Jimin se encontró mirando el calendario constantemente, esperando la noche en que podrían volver a encontrarse. Cada día en el estudio de danza se sentía más pesado, como si la espera se hiciera más difícil con el paso del tiempo. La memoria de la risa de Jungkook y las miradas compartidas bajo el cielo estrellado le ofrecían un escape de la monotonía de su vida profesional.

Por su parte, Jungkook sentía una chispa de inspiración renovada desde aquella noche. La conversación con Jimin había sido un soplo de aire fresco en su proceso creativo, y la idea de volver a verlo se convirtió en un faro de esperanza. Sin embargo, la presión del trabajo y los compromisos a menudo le dejaban sin tiempo para explorar lo que había comenzado.

Finalmente, una tarde, Jungkook decidió tomar un respiro. Sin decirle a nadie, se dirigió al mismo parque donde se encontraron antes, con la esperanza de que la casualidad pudiera jugar a su favor una vez más. Mientras caminaba por el sendero, su corazón latía con la mezcla de nervios y emoción, esperando que Jimin estuviera allí.

A su llegada, vio a Jimin sentado en el mismo lugar bajo el árbol, la misma serenidad en su rostro. La visión de Jimin, iluminado por la luz de la tarde, hizo que el corazón de Jungkook se acelerara. Con una sonrisa tímida, se acercó.

"Hola de nuevo," dijo Jungkook, tratando de ocultar su nerviosismo.

Jimin levantó la vista, sorprendido pero visiblemente feliz. "No esperaba verte tan pronto."

Se sentaron juntos, hablando de todo y de nada, compartiendo historias sobre sus días, sus aspiraciones y sus miedos más profundos. Cada palabra parecía construir un puente más fuerte entre ellos, y la conexión que habían empezado a formar en la noche estrellada se sentía aún más palpable.

El tiempo pasó volando mientras estaban juntos, y al final del día, Jimin y Jungkook se dieron cuenta de que había algo especial en lo que estaban construyendo. Aunque los desafíos de sus vidas personales y profesionales seguían presentes, el simple hecho de estar en la presencia del otro ofrecía un consuelo que no podían encontrar en ningún otro lugar.

Antes de separarse, Jungkook le propuso a Jimin una idea que había estado pensando desde su primer encuentro. "¿Qué te parece si hacemos esto más seguido? Podría ser una manera de despejar nuestras mentes y mantenernos inspirados."

Jimin sonrió, aceptando la propuesta con entusiasmo. "Me encantaría. Creo que esto podría ser justo lo que ambos necesitamos."

Así, con una nueva promesa de encuentros regulares bajo las estrellas y la esperanza de descubrir más sobre lo que sentían el uno por el otro, Jimin y Jungkook comenzaron a tejer una historia que iba más allá de las primeras impresiones, preparándose para enfrentar juntos lo que el destino les deparara.