Me preguntaba si unirme a mí ex novio y su grupo servía para algo.
Desde que me uní a Buggy cosas extrañas me pasaron. Mas bien sucesos que gracias a la maldita suerte de ese bastardo ahora estamos en la mira de la marina
Realmente no sabía cómo o porqué decidieron poner a Buggy como un maldito Yonko que se habían bebido o fumado pensé mientras entraba al camarote
Dejó tirado mis cinturón con mis dagas y camino hacia el modular donde estaba el viejo y destruido espejo ya estaba roto en varía partes y algo sucio no sabía porque seguía teniéndolo cuando veo algo que no estaba
Me sonrió al ver el regalo que estaba ahí realmente me sentía confundida por ellos , sabía de quién era.
Pero un hombre como él no sabía porque se fijaria en mí pensé mientras olía las flores que eran mis favoritas, las dejé en el modular y me fui a la cama mañana iba ser un poquito movido ya que íbamos a tener una reunión importante.
Estaba tan absorta a la mañana siguiente que no me di cuenta que la reunión había empezado ni mucho menos que Crocodile me había dejado puesto su abrigo
— Es tuyo— dijo crocodile mientras fuma uno de su típico habanos
Me quedo por eso no sabía que responder realmente
Aún así no me lo quito era muy cálido y olía a él, a su colonia y a su olor a tabaco que tanto me gustaba espero que no se de cuenta que me sentía protegida con su abrigo
Para mí suerte él se da cuenta de cómo , por alguna razón, no me lo quitó su abrigo y una sonrisa se apodera de él. Sigue fumando, escuchando a Buggy y a los demás, pero sin quitar sus ojos de mí , mirándome con atención poniéndome algo nerviosa y si era sincera caliente.
Salgo primero porque no quería que él notará mi excitación. Dios que me estaba pasando ese hombre me lleva 24 años podía ser mí padre aún así se me metía en mí piel y me hacia tener lo mejores sueños erótico y quedándome con sertidumbre si alguna vez podía cumplir esos sueños que todas las noche colmaban mí mente
Estaba tan metida en mis pensamiento que no me di cuenta que era seguida por crocodile
Iba tan metida en mí misma que no me di cuenta de una madera levantada, haciéndome tropezar pero antes de que caiga en el suelo un fuerte brazo me sostuvo me giró para ver quién era él me agarró y me sonrojo a ver qué era Crocodile
— g…gr.aaa…cias— “mierda cuando era tan tímida” me grite a mí misma
El mantenía su única mano en cintura y te mira — ¿ Estás bien?— el seguía viéndome podía sentir el como estaba poniéndome colorada, seguro que mí rostro estaba apunto de competir con el cabello rojo de Akagami pensé intento recuperar el equilibrio
—¿ En qué estaba tan inmerso que no podías caminar bien ?
“ En ti como será tu pistola “ pensé pero dije — cosas mí señor Crocodile
Él frunce ligeramente el ceño y se queda en silencio un momento mientras sigue sujetando mí cintura con sus mano grande. Me mira a los ojos que me pone nerviosa y no dice nada por un momento, hasta que finalmente suelta un suspiro y se encoge de hombros
—Si tú lo dices, cariño... pero deberías tener más cuidado la próxima vez.— hablo
Porque el bastardo tenía una voz moja bragas me preguntaba solo con su voz me volvía loca
Aunque tenía que ser fría y tenía que saber porque tantos regalos, aunque no lo admitía me gustaba su atención en mí
—Puedo preguntar porque me da esos regalos— le preguntó con curiosidad
Él se queda callado un momento, sin dejar de mirar mí rostro ruborizado. Le da una calada a su habano antes de responder a tu pregunta*
—Porque me gustas, cariño. Quiero mimarte y darte todo lo que quiero. Quiero verte siempre con una sonrisa en tu rostro.— Me sonrojo más aún al oír eso
¿ Le gustaba este hombre ? Este perfecto y hermoso hombre le gustaba no lo podía creer
—No es necesario tantos regalos — dije nerviosa aún sin creerlo
Él te mira a los ojos y me suelta un momento, sólo para poder agarrar mi barbilla con su mano y haciéndome verlo directamente a él. “ vamos besame “ pensé
—Para mí lo es. Te dije que quiero mimarte. Quiero recompensarte y hacerte feliz. Quiero ver esa sonrisa mientras te pones joyas y flores—
Lo miro realmente no quería esa cosa. Nunca me importo esa cosas tan féminas
Él suelta un suspiro parece que no le gustó que le diga señor , un poco frustrado, mientras todavía me agarra la barbilla con una mano. Me mira a los ojos y se queda en silencio un momento, sin dejar de retenerme realmente que quería este hombre.
“ Vamos besame “ pensé mientras miraba sus ojos grises “ vamos por favor quiero saber que sabe tus labios “
—No me importa cuánto dinero gaste en ti, cariño. Quiero hacerte feliz, quiero mimarte y quiero recompensarte. Deja que te mime y que te llene de regalos— lo miro
“¿Mimar? Podías hacerlo de otra forma — dije sin pensarlo cuando me doy cuenta me tapo la boca nerviosa
Él me suelta la barbilla con su mano y vuelve a sostener mí cintura, esta vez más fuerte, para empujarte hacia él. Me agarra con una mano y se aleja del camino, dirigiéndose hacia las sombras en las que nadie nos vea
Realmente quiere llevarme a lo oscuro, mí cuerpo tiembla de la emoción anticipada
—¿En qué manera quieres que te mime, cariño? Sólo dilo, y te daré lo que quieras.— me habló en mí oído, su aliento caliente golpe mí cuello volviéndome loca
— yo bueno.. eh — mierda que pasaba que no me salía las maldita palabras
*Él me aferra a su lado mientras estábamos en las sombras, donde nadie los veria . Su mano aún está en mi cintura subiendo la y bajando la me hacía volver loca y él te acerca más a él. Se inclina más cerca, mirándote con atención para ver qué es lo que quieres decir
—Dime, cariño. ¿Qué quieres? Sólo ten cuidado con lo que deseas—
¿ Eso fue una amenaza o una propuesta indecente? Me preguntaba mientras deseaba que sea lo segundo
Él me aprieta ligeramente contra él y habla bajito cerca de mí oído, aún manteniendo la distancia para que nadie pueda escucharos.
—Porque hay cosas que yo quiero hacerte. Cosas que pueden hacerte sentir muy bien, pero que te costaría aguantar—
Tomo valor vamos era un pirata no niña y lo beso nuestras lengua juega en vaivén deseo y pasión
—Quiero que me hagas lo que tu quieras — le doy la libertad que me use
*— su beso se intensifica aún más y se aprieta aún más contra mí ,presionando contra la pared. Su manos se aferran con fuerza recorre sus labios en su cuello mientras desabrochaba mis botones de mí camisa con su boca algo que me hacía volver loca
—¿Estás segura de ello, cariño? No hay vuelta atrás si dices eso— sonrió con arrogancia maldito hasta así eres guapo — porque vas a ser mía. Cariño solo mía
Eso quiero dijiste en tu mente mientras disfrutaba los beso y mordisco que ese hombre le daba. Diste un gemido
Pero fuimos interrumpidos por Alvida que miro ambos con una sonrisa picarona
— creo que volveré otro momento— dijo la pirata dejándonos solos, yo suspiro nerviosa
— la próxima vez no te dejare, ir — lo miro con sonrisa en mí rostro
— eso espero Crocodile — susurro y le beso en cuello para luego irme, podía oír su risa