17. Los rituales

55 3 0
                                    

¿Que harían ustedes si estuvieran en una situación similar a la nuestra?

¿Un día  viviremos al fin sin miedo? Creo que de esta manera, con los muchos peligros a los que siempre nos enfrentamos eso nunca sería posible.

Desperté en un lugar oscuro, parecía ser  un sótano, eso parecía. Intenté mover mis brazos, pero no pude, me encontraba atada sobre una silla. Sin embargo fue mucho peor lo que observé a mi alrededor. Los chicos se encontraban en la misma situación que yo.

Además de eso, frente a nosotros había algo realmente extraño, lo cual no lograba comprender muy bien, pero parecía ser cosas de rituales.  Velas, frutas, unas antorchas encendidas incienso, flores, muchas flores, entre otras cosas que no pude reconocer muy bien, se encontraban sobre un gran altar.

__ ¡Despierten, freyr, celeste!__ Exclamé con cierta preocupación. Pero ninguno me escuchaba. Sentía una gran desesperación.

__ ¡Por favor, chicos, no me hagan esto por favor!. ¿Que nos hicieron?!__ Grité entre lágrimas, pero todo siguió siendo en vano.

Fue entonces cuando sentí pasos acercándose, y frente a mí, muchas personas con vestimentas ceremoniales ya se encontraban. No podía ver sus rostros, pues todos traían capuchas encima.

__ ¿Quiénes son ustedes? ¿Por qué nos hacen esto?__ Pregunté con un tono elevado moviéndome desesperada sobre la silla, pero de nada sirvió.

Uno de ellos quitó su capucha, me quedé helada al ver a la doctora Amalia en su lugar, luego otro le siguió, se trataba de Matthew.

__ Al parecer has sido la primera en despertar, vesper. Vaya suerte tienes __ Dijo Amalia acercándose a mí.

__¿Que es lo que quieren de nosotros? no les hemos hecho nada, deben liberarnos__Inquirí sospechando de que podría tratarse todo esto.

Negó con un dedo__ No es posible. Después de muchos años estamos empezando a hacer los rituales__ Se acercó __ Mira mi rostro, ya estoy envejeciendo, tengo arrugas. Quiero volver a ser joven de nuevo, y tú serás nuestra primera ofrenda.

__ Son unos desquiciados ¿Por qué ayudaste a freyr, si después de todo harías todo esto?__ Miré a Matthew __ Malditos enfermos.

__ Eso, bueno, no podemos entregar una ofrenda herido, así que tuve que curarlo__ Me respondió Amalia mirándome fijamente.

__ En realidad, siendo sincero, todos nosotros tenemos entre setenta y ochenta y cinco años, vesper. Sólo que gracias a nuestras ofrendas no lo aparentamos. Tenemos juventud, salud, y humanos tontos que vienen con nosotros sin pensarlo __ Agregó Matthew con una sonrisa.

__ Son unos dementes. Aún no entiendo cómo hay  seres humanos como ustedes con los pocos que ya existimos en el mundo __ Respondí, ambos rieron, mientras Amalia caminaba hacia el altar tomando una daga del mismo.

__ Ya es la hora, Vesper. Estoy muy emocionada por volver a ser más joven, así como tú __ Dijo observando la daga sobre sus manos. Matthew se acercó a mí para desatarme. Sujetó mi brazo y me levantó.

__ ¿Vesper? ¿Que está pasando? ¡Déjenla ir ahora! __ Escuché la voz de freyr a mi lado.

Me giré un poco para verlo, ya que estaba siendo sujetada fuertemente del brazo. Desesperado él forcejeaba por intentar liberarse. Los demás también iban despertando lentamente, desorientados por no entender que estaba ocurriendo.

__ No se sientan triste por su amiga, chicos. Muy pronto cada uno de ustedes también la acompañará al más allá __ Dijo Amalia.

Matthew me haló fuertemente hacia Amelia, quién me sujetó colocando la daga sobre mi cuello. Podía ver la desesperación y el miedo en las miradas de los chicos. Liberarse por lo visto era algo prácticamente imposible.

Prueba W✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora