⊹ ᮫࣭﹆ֹ 𖤐 𝙏𝙝𝙚 𝑠𝑢𝑖𝑐𝑖𝑑𝑎𝑙 𝑏𝑜𝓎 𓂃 ୧୨

#3

Querido diario, ¿Qué acabo de hacer? El cuerpo frío de mi hermanastro esta en el suelo, lleno de sangre y con un arma filosa clavada en su estómago, su cara de terror me hace sentir.. ¿Vivo? ¡No! Querido diario, ayúdame, esto no está bien, no recuerdo lo que hice, solo sé que le falta parte de carne en el brazo, carne que estaba en mi estómago, es asqueroso. Se sintió bien, su carne sabe bien, pero ahora no sé qué hacer con el cuerpo, lo más probable es que lo esconda esta noche en mí patio, igual todos lo odiabamos. ¿Hice bien, no? ¡¿NO?!... Querido diario, estoy enfermo, no sé que hice, se sintió bien, comí su corazón, y partes de su cuerpo, ahora está bajo mis plantas, espero que sirva de algo, igual en vida fue un inútil.

Ecuador estaba nervioso, todos dentro de la Sala de la ONU lo veían raro, incluso el mismo ONU. Nadie se quería acercar, pues Ecuador reaccionaba agresivo apenas se le acercarán. Su pie se movía con rapidez, a veces llegando a golpear contra la mesa, tenía una sonrisa un poco siniestra, recordando lo que anteriormente había hecho, cubriendo parte de su rostro con su mano, tenía miedo. Mucho, pero mucho miedo a ser descubierto. El era un buen chico, él era alguien bueno.

Al terminar la reunión, el tenía paso veloz y cabeza agachada, paso al lado de su pareja, de su amor, de su obsesión. A Alemania se le hizo raro, pero al mismo tiempo se sentía tan bien que no lo molestara.. Iba a ignorarlo hasta que notó la mirada curiosa de todos, Alemania estaba sonriendo. Algunos susurrando, y Chile, con quien estaba, le preguntó el porqué no había ido con su pareja, y por qué este lo estaba evitando. Alemania no supo que responder al inicio, luego contestando que tal vez estaba cansado y que tenía que dejarlo en paz un rato. Las miradas se volvieron más pesadas, ocasionando que haga una mueca. Se despidió del chileno y fue tras Ecuador.

No tardó mucho en encontrarlo en el estacionamiento, llendo a él, y al estar cerca colocó su mano en su hombro, acción que tomó por desapercibido a Ecuador, quien giró con agresividad empujandolo.

—"¿Qué mierda, Ecuador? ¡Pareces rabioso! — Se levantó gruñendo. Ecuador se acercó y lo abrazó por el cuello, y el europeo posando sus manos en la cadera del mayor. Sintió los labios del menor sobre los suyos, haciendo que se separe.

—"¿Uh? ¿Qué pasa, corazón?— Apegando más sus cuerpos, y escondiendo su rostro en el pecho del alemán.

—"Quiero saber que sucede contigo, estas actuando extraño.— Apretó más sus caderas, ocacionando dolor al menor.

—"Aww~.. Que lindo, ¡te preocupas por mí! — Sabía que no era verdad, solo molestaba.

—"No, no lo hago. Simplemente tengo reputación que mantener.—

—"... Dios, ¿Qué te cuesta amarme? ¡Amame! ¡Amame por favor! ¡Necesito que me ames! Aprieta mis caderas hasta que se rompan, besa mis labios hasta que sangren, golpeame hasta morir, has lo que sea, te necesito conmigo. Tú eres mío, y yo seré tuyo, te necesito a tí y solo a tí."— Alzó la cabeza, con mirada suplicante, y el rostro sonrojado, sus ojos empezaban a cristalizarse, las lágrimas amenazando por salir, solo quería ser amado, ¿es tanto pedir?

Alemania lo miraba horrorizado, asqueado también. Lo empujó con fuerza, haciendo que choque contra el auto. —"¡Estas loco, LOCO, Ecuador!"— Salió del lugar, limpiando rastro de Ecuador sobre su piel.
Ecuador empezó a reír bajo, su reacción fue tan tierna.. Pero él iba a ser suyo, solo suyo, quiera o no.

Salió del lugar en su coche, pero nunca se dio cuenta de que alguien los había estado observando.