31.¿Estás bien Jenna?.

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Pov Jenna.

Me quedo unos segundos más ahí parada,no dejo de llorar y comienzo a temblar.

Hago lo que tengo que hacer,al pie de la letra,pero siempre algo tiene que salir mal.

¿Por qué vino?,si no hubiera venido todo estaría bien,todo...

Cómo puedo me acerco a la silla aún temblando me siento,mis piernas ya no soportan más,quedó quieta ahí,mirando un punto fijo, nisiquiera volteo donde está el gran espejo no quiero ver como tengo la cara.

[...]

—Jenna...falta poco para que empiece el evento,y estás a nada de salir—me comenta Enrique desde el otro lado de la habitación.

Me encuentro en Venecia, Italia,y si estoy a nada de salir,esto de viajar tan consecutibamente es agobiante,pero a la vez satisfactorio,por lo menos despeja mi mente.

—Bueno...ven.

—Ya voy...¿Algo está mal?—me acerco a el con algo de incomodidad por mis tacones que ajuste demasiado.

—No está mal.—acomoda el cuello de mi traje—Solo eso.—me da una sonrisa reconfortante.

Camino lo suficiente hacia la puerta pero me detengo en seco y me agachó lo suficiente para acomodar el sujetador de los tacones.

—¿Todo bien?

—Ah,si claro,solo los apreté demas—me reincorporo y camino a la par con Enrique.

Despues de andar en un tipo bote con demás llegamos al lugar,fotos,poses,rueda de prensa,más fotos, entrevistas,y sonrisas de por medio.

Termine todo eso y me reencontré con mis padres,ellos están acompañándome con todo este proceso.

—¿Todo bien hija?—pregunta mi madre con su típico tono de incertidumbre.

—Si,solo que pues...presión social.—le sonrio quitándole peso a la situación.

—¿Sería mejor si T/n estubiera aquí?—pregunta con ingenuidad mi madre,pero si ella supiera.

—Si...sería mejor.

No es momento de recordarme ese incidente,solo está arruinando la experiencia en algún punto de todo esto,lo que menos quiero es pensar en eso y sin recordar que no es muy buena idea decirles, además no es algo que les interese o incumba,puede sonar muy obstinado de mi parte pero es la verdad.

El día pasa y lento,tengo a Enrique pisandome los talones,todo este tiempo el ha estado conmigo,desde el evento en toreo,es muy agradable su presencia pero,estar de un lado a otro con diferentes atuendos y con compromisos diferentes,es complicado.

Además tengo otro compromiso en la noche,igual a otro cambio de locación y prendas,a veces siento que tengo más ropa y tacones que días de vida.

No negare que no me siento bien,he tratado de evadir,reprogramar y ocultar todo lo de hace unas semanas,pero no es fácil,estoy en la boca de todos y todas,y más con la canción Taste de Sabrina.

Entrevista ya grabadas salen todos los días y las personas no dejan de hablar de eso,es bueno para mí carrera profesional,pero en estos momentos lo que menos quiero es estar expuesta a esto,aún que siempre demuestro una buena cara.

Llega una vez más Enrique con lo que me pondré dentro de algunas horas.

—Jenna,¿tus padres estarán allá?—se hacerca lo suficiente.

—Si,ahí estarán,pero eso y lo sabias ¿No?.

—Si,ya sabía pero...—toma asiento a un lado de mi—solo te pregunto pues tu...has estado extraña desde que estábamos en Nueva York,y ya a pasado tiempo de eso.

¿Acaso sería ella?(Jenna Ortega Y T/n)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora