El Centro Comercial Galáctico, Xyphorae N° 3, era uno de los centros de intercambio de bienes más grandes del sector B50 de la Comunidad Galáctica.
Desde puertos para que las naves espaciales de infinidad de tamaños, hangares donde la mercancía era transportada y guardada, grandes maquinas encargadas del mantenimiento de los transportes, estaciones de recarga, restaurantes de una cantidad de culturas de todas partes del cosmos, alojamientos desde los más baratos hasta lo más lujosos, talleres de reparación y otras tiendas, así como casas de trabajadores permanentes en el centro. En medio del espacio, Xyphorae N°3 era como una gran ciudad hecha de metal en medio del espacio, donde la vida era ruidosa y ajetreada en todos sus rincones.
Ny'vara, una joven Sycralixians que apenas estaba desarrollando métodos de usar su saliva pegajosa para atrapar insectos, amaba pasear por los innumerables pasillos bulliciosos de Xyphorae N°3 cada vez que su padre, un mediano comerciante atracaba, aprovechaba el aburrido periodo de verificación y papeleo para explorar el gran centro, disfrutando de sus maravillas hasta que su padre o alguno de sus hermanos mayores la encontrara.
No importaba cuantos ciclos pasara visitando el Xyphorae, seguía encontrando objetos y lugares nuevos que explorar desde la seguridad del techo de los pasillos, o bueno, en la parte alta de las paredes, evitando de forma efectiva las grandes aglomeraciones de múltiples especies que no paraban de ir en diferentes direcciones que fácilmente podrían pisarla.
Pero, desde hace unas semanas, solo iba a un lugar en específico dentro de Xyphorae.
Con sus 8 pequeños apéndices inferiores pegados al techo de metal de un mediano pasillo en uno de los múltiples pisos inferiores del centro comercial, esquivando algunas tuberías, ignorando los gritos de los vendedores y algunas discusiones, finalmente, llego a su destino, viendo emocionada el cartel que podía leer perfectamente estando de cabeza.
"Tienda de Atrapa Sueños Humanos Kowak"
Movió con entusiasmo sus mandíbulas, haciendo chasquear un poco sus pequeños colmillos antes de avanzar lentamente, moviendo su torso inferior con emoción, apretando con sus dos apéndices superior el pequeño paquete que sujetaba contra su torso superior.
Lentamente, asomo su cabeza con sus 4 grandes ojos rojos, mirando el interior de la tienda intentando no hacer ruido para no alertar a su próximo objetivo, encontrándola rápidamente detrás del mostrador de la tienda, concentrada en un objeto en sus extremidades superiores.
Se trataba de Diana Kowak, una de los tantos humanos que habían llegado a Xyphorae luego de la entrada de la raza humana a la Comunidad Galáctica. Ny'vara la había conocido en una de sus tantas exploraciones cuando apenas había abierto su tienda... aunque su primer encuentro junto al grito que pego la humana al verla por primera vez es cuento de otro día.
Miro con aprecio todos los productos que ofrecía la tienda de su amiga Diana, esos curiosos palos finos cubiertos de esa "lana" de colores en patrones en complicados patrones, algunos circulares, otros rectangulares, suaves y bonitos a la vista. Aun no entendía el concepto de que atrapan sueños, pero no importaba mucho.
Lo importante hoy, era que Diana estaba haciendo una cosa rara con sus garras.
Ny'vara, como toda cría Sycralixians que estaba dejando de ser alimentada por las presas capturadas por sus padres, era curiosa con todo lo relacionado con lo nuevo y daba su confianza fácilmente a lo desconocido, desarrollando una gran confianza en Diana luego de 5 minutos conociéndola, por ende, estaba interesada en todo lo relacionada a los humanos. No tuvo vergüenza en preguntar si todos los humanos estaban enfermos por tener poco pelo corporal, ni le tembló su lengua cuando le pregunto la razón del porque perforaban sus canales auditivos para poner decoraciones que no cumplían con atuendos ceremoniales ni marcaban estatus entre su raza, causando, por cierto, una crisis existencial en Diana.
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| Almas entre las estrellas: Encuentros de humanos y aliens | One-Shot
Science FictionLa humanidad es la nueva raza en integrarse a la Comunidad Galáctica y tiene fascinados a los aliens. Después de muchos siglos en disputas, aliándose y evolucionando, los humanos ahora se enfrentan a un nuevo desafío... acostumbrarse a la idea de qu...