Capitulo 3: Misión

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Después de haber sido nombrado espectro por órdenes de Hades los tres jueces fueron los encargados de entrenar a Milo y durante ese tiempo en el Inframundo su corazón fue lentamente llenado de oscuridad

Con el paso de los años la personalidad de Milo fue cambiado de ser un niño inocente a ser alguien completamente diferente y también de temer, a los 10 años Milo fue caracterizado por ser alguien agresivo a la hora de pelear y mantenerse con la mente fría sin mostrar ningún sentimiento de compasión a sus oponentes causándoles miedo a los espectros, sin embargo, seguía teniendo un poco de su antigua personalidad amorosa como el cariño

¿Cariño por quién? Por el juez Aiacos se Garuda

Pues desde que era entrenado por Aiacos cuando era su turno lo veía como alguien de admirar era muy bueno con él además de paciente no como Radamanthys, lo había comenzando a ver como un hermano mayor y el espectro de Garuda tenía ese mismo pensar pues se había encariñado con aquel pequeño

A los 15 años ya era un joven respetado y temido por todo el ejército de Hades a excepción de los Tres Jueces y Pandora, ningún espectro se atrevía a si quiera mirarlo pues algunos decían que cuando te miraba podías sentir como tus huesos se congelaban por la frialdad de su mirada, casi idéntica a la de Hades

A los 20 Milo ya era un espectro reconocido, en ocasiones había sido enviado como mensajero al templo de Poseídon y los Generales Marinos le temían por su gran poder, Milo era alguien orgulloso ademas de frío y calculador pero también era alguien que le gustaba torturar, pues cuando algún espectro era castigado él era el encargado de hacerlo sufrir....y le gustaba

-Milo-El nombrado se dió la vuelta y vio a Aiacos acercarse a él-¿A dónde vas?

-A cumplir con mi misión-Respondío Milo inexpresivo, tenía puesta una capucha negra que lo cubría totalmente

-Ya veo, aún sigues con esa tarea ¿Cierto?-Pregunto Aiacos y Milo solo asintío-¿Quieres que te acompañe?

-Ys no soy un niño como antes Aiacos, eso ya no es necesario-Respondío Milo, Aiacos lo miro por un momento y sonrió de lado

-Había olvidado que ya has crecido, suerte Milo-Dijo el mayor, Milo se permitió regalarle una sonrisa

-Gracias-Y con eso Milo se marcho, Aiacos lo siguió con la mirada hasta que lo perdió de vista entre la niebla del Inframundo

Cuando Milo salió a la superficie inhaló por unos minutos el fresco aire, lo que amaba de esa misión es que podía salir y sentirse libre por unos momentos, pero dejo eso de lado y se concentro en su objetivo dando se la vuelta para observar con semblante serio el lugar donde estaba

El Santuario de Athena

Se cubrió bien con la capucha y se encamino al lugar, su misión era observar a los caballeros, cada uno de sus movimientos

Recorrió la primera casa, Aries, Milo sabía que nadie la habitaba pues sabía que Mu se había marchado de ese lugar muchos años atrás

Siguió su camino hasta Tauro evitando ser visto por Aldebaran

Cuando llegó a la casa de Géminis sintió un poco de melancolía recordando que cuando era niño siempre iba a ese lugar a jugar con los gemelos quienes lo veían como un hermano

Sabía de ante mano el conflicto que habían tenido, Kanon se rebeló y Saga lo encerró en Cabo Sunion ¿Quien hubiera dicho que terminaría siendo Saga el causante de tantas muertes como Shion y Aioros? Una sonrisa de burla surco sus labios, ninguno de ellos le importaba ahora eran sus enemigos

Cruzó la casa de Cáncer, Leo, en Virgo tuvo que ser las cauteloso pues no quería que Shaka lo descubriera, Libra siempre estaba vacío pero al llegar a Escorpio sintió de nuevo ese apretón en el pecho siempre que pasaba por aquel templo, se adentro al lugar hasta estar en medio del templo donde vio la que antes iba a ser su armadura, aún después de su muerte ningún aspirante llegó a se digno de portar la

Milo la Estrella del CaosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora