40

1K 81 6
                                    

La mañana transcurría tranquila en el departamento de Alessia, donde, tras el caos de la noche anterior, el silencio y el aroma a café recién hecho ofrecían un respiro muy necesario

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La mañana transcurría tranquila en el departamento de Alessia, donde, tras el caos de la noche anterior, el silencio y el aroma a café recién hecho ofrecían un respiro muy necesario. Sentada en el sofá, con su cabello aún algo desordenado y envuelta en una sudadera, Alessia revisaba su teléfono, tratando de ponerse al día con los mensajes acumulados en sus redes sociales. Al abrir Instagram, su corazón dio un pequeño vuelco al ver una notificación inesperada: un mensaje directo de Charles.

Se quedó en shock durante unos segundos, mirando la notificación sin atreverse a abrirla. "¿Charles me ha escrito?" pensó con un pequeño nudo en el estómago. Tomando aire, deslizó el dedo y abrió el mensaje, tratando de mantener la calma.

"Buenos días, Alessia :) Fue divertido anoche. ¿Te gustaría salir a pasear por Mónaco hoy?"

La sencillez del mensaje, acompañado de una carita sonriente, hizo que su corazón latiera aún más rápido. Las palabras eran simples, pero la posibilidad de pasar una tarde con Charles Leclerc, de conocerlo fuera del ambiente de fiesta, la emocionaba.

Después de algunos segundos, pensó cuidadosamente en su respuesta. No quería sonar demasiado emocionada, pero tampoco quería parecer indiferente. Con un ligero temblor en las manos, escribió:

"¡Hola, Charles! Claro, me encantaría. ¿A qué hora y dónde te gustaría vernos?"

Unos instantes después, la respuesta de Charles apareció en su pantalla, con esa rapidez que solo hacía que su nerviosismo creciera:

"Paso por ti a las cuatro. Podemos caminar un poco y tomar algo. :)"

Alessia sonrió y aceptó la propuesta, guardando su teléfono con una mezcla de emoción y nerviosismo. Luego, se apresuró a prepararse; después de todo, no todos los días se tiene la oportunidad de salir a pasear con una estrella de la Fórmula 1. Revisó su armario, pasando de un atuendo a otro, intentando encontrar el equilibrio perfecto entre casual y elegante, algo que le permitiera sentirse cómoda pero que también reflejara su estilo.

Finalmente, optó por un vestido blanco sencillo, con un toque fresco y veraniego, acompañado de unas sandalias y un sombrero que la protegiera del sol. Una vez lista, se dio una última mirada en el espejo y salió, intentando calmar sus pensamientos. Mientras caminaba, sus amigos le enviaban mensajes curiosos, preguntando por qué estaba tan arreglada. Sin darles detalles, solo respondió con un emoji de carita traviesa, reservando el secreto de su encuentro para ella misma.

El sol brillaba intensamente sobre Mónaco, reflejando su luz en el mar Mediterráneo y bañando las calles adoquinadas con un cálido resplandor. Alessia se encontraba esperando nerviosa en la entrada del edificio, ajustando una y otra vez su atuendo, intentando convencerse de que no estaba demasiado arreglada.

El rugido de un motor familiar la hizo girarse, y allí estaba Charles, llegando en su elegante Ferrari. Alessia sintió cómo su corazón latía más rápido al verlo bajar del coche con una sonrisa relajada en el rostro.

24/7 ▬▬ Charles Leclerc ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora