¿Cómo enamorar a Choi San?

Tip #2 : acaricia su cabello

“Tip #2 : Acaricia su cabello con gentileza mientras hablan, eso lo tendrá sonriendo y pensando en ti todo el día.”

WooYoung había pasado toda la tarde pensando en la mejor manera de acercarse a San para poder mimarlo un poco sin parecer demasiado extraño o forzado. Le costaba un poco de trabajo entender cómo San lo hacía ver tan fácil, siempre se acercaba a él de manera sutil y tan natural que a veces le sorprendía cómo terminaba entre sus brazos para recibir cariño. Él no podía hacerlo tan bien, sentía que sí lo intentaba, San le descubriría en su (para nada malévolo) plan.

Hizo un pequeño puchero y observó la hora en su teléfono. 06:15PM.

Todavía no se acostumbraba del todo a que San ahora llegara más tarde de lo usual porque al parecer, al castaño le había entrado la necesidad de hacer ejercicio por lo que saliendo del trabajo ahora no llegaba directo a casa, se iba al gimnasio por casi dos horas y después regresaba cansado, sudado, con ese tipo de camisas pegadas a su cuerpo que hacía ver bastante prominente su pecho, sus brazos y marcaba muy bien su cintura, lo que últimamente tenía a WooYoung sonrojándose de vez en cuando y… Bueno, ese era un tema que no se discutiría ahora.

Lo que menos le gustaba de esta nueva rutina que mantenía el mayor era que cuando llegaba, ahora no quería ser recibido con abrazos y besos como antes. Había sido muy claro cómo quería que WooYoung esperara a que se diera un baño para ahora sí poder saludarlo y abrazarlo, escondiéndose bajo la excusa de que como estaba sudado y sucio no le dejaba una buena sensación que lo tocaran y mucho menos que lo abrazaran. El primer día que eso pasó, WooYoung terminó llamando a SeongHwa llorando para decirle que San ya no lo quería porque por más que insistió en que no le molestaba su sudor, el mayor no quiso recibir su abrazo ni sus besos. San tuvo que salir empapado de la ducha y cubierto con una toalla esa noche para poder consolar al cambiaformas y decirle a SeongHwa que no, las cosas no habían sido así y que, aunque WooYoung estaba convencidisimo de que lo devolvería al refugio, eso no pasaría. Él solo había querido darse un baño.

De todos modos, le tomó solo dos días a WooYoung para encontrar una muy buena solución a su problema. Así que esa tarde cuando escuchó la puerta ser abierta, rápidamente tomó su forma animal y corrió a la sala para darle la bienvenida a su Sannie, quien vestía un pants holgado y una camisa negra ajustada de mangas cortas.

WooYoung maulló largo y fuerte mientras se acercaba a San, restregando su cuerpo en las piernas del humano una y otra vez, sintiendo como un par de manos le acariciaba su cabeza y su cuerpo.

Muy buena solución si se lo permitían decir. ¿Contacto humano? No gracias. ¿Acariciar un gato? Claro que sí.

—Buenas tardes mi precioso Woonie. —Saludó San, dejando su pequeña maleta con su ropa de trabajo en el suelo para mimar al felino. —¿Me extrañaste?

—Meow! —Comenzó a ronronear y restregar más su cuerpo en las manos ajenas, incluso recostándose en el sueño con su pancita hacia arriba, haciendo sonreír a San.

—Muy lindo, pero no me vas a distraer de esa manera. —Le dijo para después tomar su maleta y comenzar a caminar hacia el pasillo que le llevaba al baño. —Me voy a bañar por más bonito que seas.

Woonie maulló a manera de reproche y le siguió a paso rápido hacia donde el castaño iba, maullando una y otra vez mientras le veía. San solo rió bajito y entró al baño.

WooYoung tomó su forma humana y se cruzó de brazos con un puchero.

—¡No te tardes! —Le dijo triste.

Sus palabras fueron ignoradas claramente.

Varios minutos después que se sintieron como una eternidad San salió del baño vistiendo su pijama y una toalla pequeña sobre sus hombros, misma que utilizaba para quitar el exceso de agua sobre su cabello. Caminó hacia su habitación y sonrió cuando sintió un par de pasos detrás de él, pero no se dió media vuelta y solo entró a su pieza para dirigirse al peinador.