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- ¿y esto? - Momo apunta con su dedo índice un cálculo matemático que estaba completando.

- ¿que pasa con eso? ¿No lo comprendes?

Momo negó con la cabeza dedicándole una pequeña y dulce sonrisa, esto derritió inmediatamente el corazón de dahyun quien solo se acercó a ella para explicárselo.

- mira, la x significa que debes de encontrar su valor y esto solo lo vas a logras despejandola, para esto tenes que resolver el problema y hacer los cálculos.... Al final de esto tu respuesta sería el valor de la x.

- ohhh... Era tan fácil.

- lo ves, así vas a aprender muy rápido.

Esas palabras parecieron hacerle feliz a momo quien se dedicó a completar con éxito el ejercicio.

Dahyun al ver que ya había ayudado lo suficiente y que ella debía de terminarlo solita abrió su teléfono para contestar mensajes de Chaeyoung, su mejor y capaz única amiga.

El silencio fue cortado de pronto cuando por fin la japonesa decidió dar paso a una conversación que para nada sería corta.

- señorita dahyun....

- no me digas así, tenemos la misma edad - exclamó soltando una pequeña risa.

- bueno... Dahyun, ¿puedo hacerte una pregunta?

- obvio que puedes.

- ¿tu no querías ser mi tutora, no? Escuche de una chica de nuestro mismo salón que te habían obligado a hacerlo pero quería decirte que si esto es molestia para ti, no desearía que sigas dándome clases por más que esta sea la primera vez que vengo a tu casa.

Sus palabras raramente le llegaron al corazón de dahyun ya que sintió mucha pena por aquella chica, la tenía frente a ella y se notaba la tristeza en sus palabras. Se sentia una carga y comprendía que luego de lo que escucho piense eso.

En un movimiento rápido se sentó al lado de la japonesa y esta solo se limitó a seguirla con la mirada.

- la directora me habló de tí, me dijo que necesitabas ayuda durante todo el año y prácticamente me pidió por favor para que pueda enseñarte todo, de inicios lo pensé bien y no me convencía del todo pero no porque no quiera....

Sin terminar de explicárselo escucha un sollozo por parte de Momo y esto le saco toda palabra de la boca.

- oye, ¿que pasa? - suena preocupada por momo pero aún así le da su espacio y tiempo para calmarse.

- no es nada, estoy bien.

Lo que dijo no la convenció ni un poco, uno no llora por nada o puede que si pero este no era el caso, se veía triste y comprendía que el porqué de  ello.

- puedes contarme lo que sea, te prometo que nada de lo que digas va a salir de esta habitación. Tenelo por seguro.

La habitación conservó su silencio por un buen tiempo y dahyun evitó todo contacto visual con momo en ese trance de tiempo, no quería incomodarla. Con pena miro de reojo rápidamente a momo viendo como poco a poco secaba con la manga de su suéter las lágrimas que caían lentamente por sus mejillas para luego soltar un suspiro muy fuerte.

- ¿puedo abrazarte?

Esas fueron las únicas palabras de la japonesa en todo ese silencio pero fue lo suficiente para que se animara a verla a los ojos, sin decir algo, asintió con la cabeza.

Esta tiro su cuerpo completamente arriba de dahyun, rodeando suavemente sus brazos en su cuello y ejerciendo algo de fuerza en el dichoso abrazo.

Fue algo nuevo siendo que no la conocía de nada, sabía que era su compañera pero más allá de eso era una completa desconocida. Esto la confundió un poco pero no podía negarse a aceptarle el abrazo, se notaba que lo necesitaba.

Fue raramente reconfortante para dahyun sentir el corazón de momo calmarse de a poco, no podía pensar claramente en ese momento pero sin duda alguna ese sentimiento le gusto demasiado.

El día transcurrió normalmente luego de todo eso sacando lo incómodo que fue para ambas el silencio que había derrepente pero para suerte de momo, dahyun, nunca se callaba y siempre tenía algo que decir o bueno casi siempre.

- ¿terminaste?

Momo asintió entregándole su cuaderno de cálculos.

- ohh, se ve que eres buena para las matemáticas.

- ¿tu crees?

- obviamente, llenaste toda esta carilla de cálculos en menos de 30 minutos.

Halagar a momo era como halagar a una niña pequeña, se sentía su alegría en la cara y se veía que no estaba acostumbrada a recibir esos tipos de comentarios.

- ¿crees que pueda mejorar este año? Ya llevo mucho tiempo aquí y nadie aún se dio el tiempo a enseñarme cosas básicas, fui al colegio pero aún así hay cosas que no entiendo.

- no es fácil acostumbrarse a otro tipo de educación, ¿como eran las cosas en Japón?

A momo nadie hasta el día de hoy se había interesado en saber su historia o darse el tiempo a preguntar por algo de ella, sin duda alguna se llevaría muy bien con dahyun.

- por donde empiezo... Yo si te soy sincera no tenía ganas de mudarme, lo hice por mi papá y viviendo aquí, con una casa y buena economia se le ocurre serle infiel a mi mamá - para dahyun la tranquilidad por como lo contaba era algo a destacar, parecía que no era un tema que le afectaba demasiado o eso piensa - nos quedamos solo ella y yo, pasaron dos años ya de eso y no es algo que me hace sentir mal al día de hoy.

Dahyun solo la escuchaba sin decir una palabra, le prestó tanta atención que le dio cierta confianza a momo para poder contárselo.

Así la primera clase término y ya la japonesa supuestamente había vuelto a su hogar casi cayendo la luz del sol, por fin tenía un momento para sentarse y recalcular lo que había pasado en esas 6 horas. Pensó y pensó lo suficiente hasta quedar dormida profundamente.


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⏰ Última actualización: Sep 08 ⏰

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