·˚ - 𝓐𝘧𝘭𝘪𝘤𝘤𝘪ó𝘯.

* . • El cielo azul. (Ep - 1.)

— Mi mesa estaba llena de papeleos, tenía que calificar varios exámenes de los pequeños niños que cuidaba, era sencillo, ya que las preguntas no tenían mucha ciencia, mi teléfono móvil sonó, al parecer era una alarma.

— Estire mi mano y sujete el teléfono móvil, la alarma tenía el asunto de la junta que tenía con algunos padres de familia, acomode el papeleo que estaba en el escritorio y sujete mi bolso saliendo de la institución.

— Había tenido cientos de juntas de padres de familia, pero está vez conocería al padre de Megumi, uno de mis mejores estudiantes, nunca se había sabido cómo estaba en la primaria, ya que su padre nunca hizo ni el mínimo esfuerzo para inscribirlo.

— Suspiré brevemente y llegué a la sala de juntas, los padres reunidos, unos hablando con otros.

- "Buenas tardes." - Hable rompiendo su círculo social encendiendo el televisor, suspiré brevemente y mi mirada vago entre la multitud, buscando a alguien fuera de lo común, era difícil encontrar entre tanta gente.

- "Como saben, abordaremos distintos temas, uno de ellos es la importancia de los padres en la vida estudiantil del infante." -Dije colocando un archivo en el televisor, el cual reflejaba ciertos puntos que eran importantes.

— Después de la junta.

— Estrechaba la mano de varias madres las cuales me agradecían por el buen trato que tenía a sus hijos, yo simplemente sonriente asentía, ya que ese era mi deber como maestra, la fila termino, y frente a mi estaba un hombre alto, con facciones rudas, pero a su vez sencillas, levanté la mirada, y Dios mío, entonces ese era el padre de Megumi.

- "Buenas tardes señor Fushiguro." - Dije amablemente mientras estiraba mi mano esperando su estrecho.

- "No hay necesidad de la formalidad." -Dijo indiferente dejándome con la mano estirada.

- "Una disculpa..." - Frote levemente mis manos y las coloque en el escritorio que dividía nuestros cuerpos.

- "Mire señorita, Miwin, sea rápida soy un hombre ocupado, y no entiendo esta mierda de venir a las juntas de padres." - Dijo aquel peli-negro, con un ceño de molestia mientras sus dedos se dirigían a su cien, dejando un pequeño masajeo.

- "Oh claro... Una disculpa nuevamente. He querido contactarlo, pero nadie sabe nada de usted." - Mi mirada examinaba cada parte de el, esa chamarra de cuero, y esa camisa negra, la cicatriz que había en su labio resultaba atractiva ante mis ojos, trague saliva y continúe hablando.

- "Su hijo Megumi Fushiguro, es uno de los mejores estudiantes del calendario escolar, debería de estar presetarse-..." -No pude terminar de hablar, esa voz tenue nuevamente volvió a llenar el aire con una molestia sugestiva.

- "Al menos ese mocoso idiota sabe hacer algo, algo que no sea arruinar la vida de los demás." - Se cruzó de brazos, mientras un mechón de su cabello estaba un tanto desordenado.

- "Si eso es todo lo que quería decir, no me hubiera citado, es una mierda saber de ese niño." -Se dio la media vuelta y comenzó a caminar hacia la salida.

— De una u otra manera, en mi había cierto tipo de molestia palpable, sujete un bolígrafo y lo lance hacía la puerta, percatandome que había llamado su atención y se había girado para verme.

- "¡Oiga usted! ¡No debería de hablar de su hijo de esa manera! - La molestia arrollaba cada palabra que decía en voz alta, mis mejillas rojizas por la molestia, y mis cejas arqueadas en señal de desaprobación.