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La noche en la que Aemma perdió la vista del ojo izquierda fue horrible para la Reina Consorte Alicent Hightower, después de todo su hija había perdido cualquier oportunidad para casarse por aquel incidente. Ningún Lord querría una esposa medio ciega que además de eso parecía salvaje.

Aemma nunca fue la niñita tierna, dulce y delicada que Alicent quería que fuera, ella era una persona muy distante de lo típico que debían hacer las mujeres de época y solo cumplía con vestirse como una mujer y no con las ropas que solían usar personas como Daemon o Ser Criston Cole.

Por eso, cuando era pequeña apenas y recibía propuestas de matrimonio de parte de Lord's, puesto que no muchos tenían un gusto real por las mujeres poco femeninas, totalmente lo contrario a Halaena, su hermana, la cual desde que nació fue inundada con cartas pidiendo su mano.

Esa noche, Alicent, sabiendo que su hija jamás volvería a recibir una propuesta de matrimonio, exigió violentamente que como compensación por el daño causado a su segunda hija, Lucerys Velaryon se comprometeria con ella.

Rhaenyra se rehusó, argumentando que Luke ya estaba comprometido a Rhaena Targaryen, por primera vez en años recibiendo la negativa de su padre, quien autorizo el compromiso entre los tres niños y mando a Aemma a Marcaderiva, exigiendo que también fuera acompañada por su prometido y Rhaena.

Esa noche no sólo se produjo un matrimonio doble, si no que Rhaenyra perdió un niño, Aemma la vista y Rhaena la libertad.

Avy Jorrāelan | Lucemond.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora