🌺 | 𝐁𝐨𝐲 𝐆𝐮𝐚𝐧𝐚𝐜𝐨

🍓[ˢᵛ♡ʲᵖ]🍓

Ambos country' s ya habían llegado al lujoso restaurante que fue reservado a último momento por el asiático, China se portaba como todo un caballero con el salvadoreño enserio le interesaba hasta lo más mínimo de ese joven muchacho, iba a protegerlo de hasta el capitalista de Estados Unidos.

- Dime, ¿estás soltero? -

- ¿Ah que viene la pregunta? -

- Te seré honesto, me interesas y mucho -

- ¿Interesarte? -

- Si, eres muy adorable y me interesa tu actitud o personalidad, la verdad solo me llamaste la atención -

- ¿Ok?(No entendí, pero intentare poner una cara de que si entendí) -

- Bien, ¿Qué te gustaría comer, pequeño? -

- La verdad no tengo idea, jamás había visto está comida...tan cara -

- ¿Qué me aconsejas tú? -

- Pues a mi gusto, Lobster Thermidor ¿está bien? -

- No tengo idea de que es, pero si -

Salvador simplemente sonrío, no tenía ni idea de que era ese plato pero no hacia mal probar cosas nuevas, ¿no?, además era un plato fino, aún que se sentía un poco mal por que era bastante dinero, no quería hacer gastar mucho al chino.

[♡Saltó de tiempo♡]

China estaba en rumbo a dejar al salvadoreño a su casa o mejor dicho a su país, pero a surgió un ligero inconveniente a China se le olvido sus llaves y les toco volver a donde ONU.

- En verdad lamento este incidente, Salva -

- No me molesta, tú tranquilo -

- 中国！ - 

- ¿Hm? -

Un country sorpresivamente saltó sobre China, así que Salvador mejor se aparto por que se terminaron cayendo.

- ¿Eh? -

- ¡Japón!,¡ ¿Qué pasa maldita sea?! -

- ¡No me grites! -

Un japonés lloroso le reclamo a China, y en ese momento China recordó que le había prometido a Japón que lo llevaría a sus territorios.

- ¡Me dijiste que me ibas a llevar contigo!, ¡llevó un montón de tiempo aquí! -

- Si si, solo lo olvide -

China aparto a Japón de encima suyo, y ambos asiáticos se levantaron, Salvador se se mantuvo callado y atento, un tanto incomodó pero estuvo en silencio.

- Ah, Salvador lo lamento, Japón es un tanto extraño -

- ¡Yo no soy extraño!, por cierto ¿con quien hablas? -

- Eh, Hola -

- ¡Awww! -

Los ojos del japonés brillaron y se abrieron más, le pareció tan tierno y lindo, le dieron ganas de acariciar sus mejillas y darle un abrazo hasta que sus cachetes se pusieran rojos.

- ¡Que adorable!, ¿como te llamas? -

- Salvador -

- ¡Tu voz es más tierna de lo que pensé! -

- Ah...¿gracias? -

Japón abrazo al guanaco de la nada, algo que asusto al salvadoreño o bueno le sorprendió pero  igual acepto el abrazo, le gustaban de todas formas.

- Bueno bueno, Japón ya suéltalo, voy por las llaves de mi casa y iré a dejar a Salvador a su territorio, y luego te vas conmigo Japón -

- ¿Y si llevamos a Salva a tu territorio? -

- ¿Qué? -

- ¿Disculpa? -

- No puedo, sus hermanos me matarían, ya vi como lo cuidan, no quiero saber que harían si algo le llega a pasar -

- Ah-a, yo no eh viajado a ningún otro país aparte de este y los territorios de mis hermanos -

- ¿Uhm?, pero tu eres alguien libre, si China no te invita, yo lo hago -

- A-ah bueno eso si, soy alguien mayor y puedo tomar mis decisiones pero aún así me da miedo -

- ¡Yo te voy a cuidar!, ¡así que vamos a China! -