CAPITULO 1

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UZUMAKI

Aquel pelinegro pronunció su nombre como si de un conocido se tratara y no estaba mal al final se conocían hace muchos años...

Uzumaki: no te queda bien el cuerpo de ese niño_ diría el uzumaki con su voz muerta resonando en la oscuridad

Kenjaku: que puedo decir_ diría Kenjaku mientras se encongia de hombros_ es el cuerpo perfecto para continuar con mi plan_ diría el pelinegro restandole importancia

Uzumaki: sigues con ese plan? cerebro asqueroso_ su voz aunque insultase no trasmitia nada, no había asco alguno enrealidad

Kenjaku no hizo más que soltar una risa suave y profunda, sin inmutarce por sus palabras alfin y al cabo no había mentiras, era un cerebro que depende de la perspectiva de cada uno podrías encontrar asqueroso o no, sinceramente no le podría importar menos.

Kenjaku: obvio naruto-kun, después de todo no sería increíble que cada ser humano pueda usar energía maldita?_ diría el pelinegro cerrando los ojos tranquilamente


Humanos contra humanos

     

      

  Humanos contra maldiciones

 
   

    

   Maldiciendose constante mente

                          

                         

  ~~Puff~~

                     

 

~~Increíble~~

La emoción se transmitía con cada palabra, alfin y alcabo estaba hablando de su más grande anhelo, todas las cartas estaban en la mesa

  Satoru gojo

Itadori  yuji

Y

Ryomen sukuna

Todas las piezas estaban en su orden, desde el nacimiento de itadori yuji...
Simplemente tenia que comenzar con la primera y más esencial face de su plan y todo se volvería patas arriba

Ese era el pensamiento de kenjaku, todo estaba listo, desde sus alidos temporales hasta la caída de su más grande enemigo

   Satoru gojo


  Nadie se lo esperaria

El llamado naruto no hizo nada para dirigirle toda su atención al pelinegro, después de todo hubo un tiempo en el que eran cercanos  y sabia de su meta mas anhelada, pero eso ya no importaba

El pasado no importaba...  en esta situación

Ya no estaban juntos...

  Y tampoco quería volver...

No le respondió simplemente siguió con su vista en el fuego, lo había escuchado

Pero...

   No podía importarle menos  

Ni la humanidad, ni los sueños de kenjaku. ninguna importaba, ellos eran parte de su pasado...

 

el muertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora