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Los dos hermanos caminaron con tranquilidad por las calles, a Seokjin le gustaba tomar la mano de alguien y el agarre hacia sentir seguro a Soo Hyun, así que fueron con sus manos unidas y el menor los fue guiando a ambos hacia la casa de Taehyung 

-¿Cómo están Jungkook y Jimin?- pregunto Seokjin 

-Tristes… Y solos-

Seokjin bajo sus orejas 

-¿Y tu?-

Soo Hyun se encogió de hombros 

-Solo, pero feliz-

Seokjin rio un poco, acarició una de las orejitas del otro, haciendo que ronroneara

-¿Cuándo vienes a vivir con nosotros?-

Soo Hyun negó automáticamente 

-Nunca-

-¿Por qué?- Seokjin hizo un pequeño puchero 

-Doy mala suerte- respondió el menor. –Gato negro-

-Bueno… yo también doy mala suerte- confesó Seokjin, acomodando sus cabellos con algo de vergüenza 

-¿Cómo estaría tu casa si hubiera dos “mala suerte”?-

Seokjin abrió sus ojos de más con cierto terror

-Pero…. Yo quiero que estés en casa, conmigo, no me importa tu mala suerte, a Namjoon tampoco le importará, no le importa la mía-

Soo Hyun sonrió con ternura, asintió, le encantaba demasiado la idea de volver a vivir con su hermano, como cuando eran pequeños 

Al llegar a la casa de Taehyung, fueron recibidos por Yoongi, quien al principio se mostró alegre y normal, pero en cuanto Soo Hyun se alejó un poco de Seokjin el mayor fue hacia él y el híbrido se preguntó cuándo había comenzado a retener lágrimas y comenzó a hablar rápido y algo desesperado

-Jinnie, los dos están muy tristes, muy mal y casi no comen, y no me gusta verlos así, ¿Puedes ayudarlos? ¿Por favor?- escucho pequeños lloriqueos caninos, y frunció el ceño ligeramente, Seokjin asintió sin querer comentar nada al respecto. –Cuento contigo, ahora… Necesito a Hope- bajo el rostro y se alejó de él, caminando lejos de la sala de estar. –¡Hoseokie!-

Fueron dos segundos de silencio para que se escucharán pasos apresurados desde la planta superior, y Seokjin y Soo Hyun miraron con orejas erguidas y ojos atentos al pelinegro que bajo corriendo y fue hacia el dormitorio donde Yoongi se fue a esconder 

-¡cinco minutos! ¡Cinco minutos y ya vuelves a llorar, Yoon!- escucharon antes de que la puerta se cerrara y quedarán en un silencio incómodo los dos 

-Raros- dijo Soo Hyun. –Y bonitos- añadió, su hermano asintió 

Seokjin había esperado unos minutos acostumbrado a que sus amigos bajarán solos para recibirlo, pero eso no había pasado esta vez, así que fue hacia arriba después de aquel numerito con el más bajo y su ardilla rara

Toco la puerta y se asomo un poco antes de entrar, escucho a Jimin sorber su nariz y al encontrarse con él el tigre limpiaba sus lágrimas, mientras un conejo marrón en su regazo se dejaba mimar

-Hola, Jinnie- dijo el rubio con una sonrisa penosa 

El gatito bajo sus orejas con tristeza, un puchero se plantó en su rostro, se acerco a él y lo abrazó con firmeza, comenzó a ronronear en un intento de no sentirse tan mal 

-Sabíamos que estabas vivo- dijo Jimin. –Aunque Taehyung no nos creía- su voz tembló un poco al decir el nombre de su humano 

Ex humano 

Seokjin dejo mimos en las orejas de Jimin, haciéndolo sonreír un poco 

-Los extrañe mucho- confesó el pelinegro 

-Nosotros igual- respondió Jimin 

Seokjin se sentó en la cama junto a ambos, Jungkook saltó hacia él, al mayor de los tres le pareció triste porque sus saltos ya no eran enérgicos y alegres como lo eran antes, se refugió en su regazo y el felino lo acaricio 

-Jim, ¿Me pasas su peine?- pregunto Seokjin, señalando el peine favorito del menor, de color celeste y con hebras suaves y en gran cantidad, una vez en su mano, comenzó a peinar al conejo marron, sabiendo que al pequeño Jungkook le encantaba 

Conforme pasó el rato, Seokjin comenzaba a ver la tristeza y melancolía de sus amigos, tanto que casi podía sentirla también, y se sintió mal por tenerles pena 

Decidió ayudarlos, y lo primero que se le ocurrió fue obligarlos a bañarse 

Con solo pensar en el agua su cola se erizó, pero suspiro para calmarse cuando pensó que tenía que hacerlo por sus amigos 

𝑩𝒂𝒅 𝑳𝒖𝒄𝒌 (𝑵𝒂𝒎𝒋𝒊𝒏)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora