Adoptado por una familia rica

capitulo 129

 Capítulo 129 Capítulo Extra: Eventos Pasados:

　　No quedaba nadie más en la habitación, una persona enferma y una persona sana.

　　Chen Wengang estaba apoyado en la almohada, con la cabeza ligeramente inclinada y su ojo derecho presionado con una gasa. Sus padres dañaron su cuerpo y el lugar donde debería haber estado su globo ocular ahora se ha convertido en un empaste. Su respiración era muy discreta y apenas se podía ver el ascenso y descenso de su pecho debajo de la colcha.

　　Huo Niansheng acercó suavemente una silla y se sentó junto a la cama.

　　Bajó la voz muy suavemente: "Deberías dormir un rato".

　　El anestésico todavía estaba funcionando y Chen Wengang no sabía si lo escuchó o no, por lo que no dijo una palabra. Su conciencia parecía estar fuera de su cuerpo y su rostro estaba tan pálido como un trozo de papel. Pero después de un tiempo, Chen Wengang tomó la iniciativa de cerrar los ojos.

　　Su respiración se volvió más débil.

　　Huo Niansheng se inclinó hacia adelante, lo miró y no pudo evitar estirar los dedos para sentir su respiración.

　　Después de observar durante un tiempo desconocido, Huo Niansheng se levantó, se metió las manos en los bolsillos y caminó de un lado a otro de la habitación como si estuviera paseando. Salió a ponerse zapatillas y el sonido de sus pasos fue completamente absorbido por la alfombra. Se detuvo junto a la ventana y miró hacia abajo durante un rato, preguntándose qué estaba pensando.

　　Amanda se acercó y no se atrevió a tocar la puerta con fuerza. Simplemente bajó la voz y convenció al jefe de que descansara para poder mirar en su nombre.

　　Huo Niansheng lo miró y dijo que no.

　　La sonrisa de su rostro había desaparecido por completo y parecía tan solemne como si acabara de bajarse de la mesa de negociaciones.

　　Ella sabiamente se retiró sin más interrupciones.

　　Huo Niansheng caminó por la habitación dos veces más. Antes de que la enfermera regresara, encontró algo en su bolsillo y lo sacó. Era un amuleto rojo brillante. Lo levantó y lo miró durante mucho tiempo, arqueó las cejas, suspiró y lo metió suavemente debajo de la almohada de Chen Wengang.

　　*

　　Hasta que despertó, Chen Wengang todavía se negaba a hablar.

　　Antes de entrar al quirófano, Huo Niansheng podía hacer algunas bromas con él, buscando deliberadamente un tema ligero. Después de perder su ojo derecho, parecía haber perdido la mayor parte de su energía. Expresó su resistencia a través del silencio y se negó por completo a comunicarse con el mundo.

　　Después de la operación, a Chen Wengang le extirparon el ojo derecho, pero su ojo izquierdo solo recuperó una visión débil.

　　Ni siquiera Huo Niansheng tenía una buena solución para esto. El cirujano jefe ya es el mejor oftalmólogo del hospital y el mejor de la industria. Sólo podía decir con cautela, haz lo mejor que puedas. La etapa de recuperación del paciente tiene mucho que ver con su propio estado físico y mental.

　　Chen Wengang estaba deprimido. Al parecer su estado físico y mental no era tan optimista como esperaba el médico.

　　Huo Niansheng charlaba como si la última tía en casa lo hubiera poseído.

　　Chen Wengang vio el amuleto y Huo Niansheng luego lo ató al gancho en la cabecera de la cama. Siguió buscando temas, hablando de la gran lucha por el primer incienso en el templo el día de Año Nuevo, de cuántos hombres, mujeres y niños hicieron cola durante toda la noche y de cómo el Templo de Ning'an solía tener mucho incienso y Qué popular era entre los ricos. Después de un tiempo, le preguntó a Chen Wengang si estaba aburrido y quería jugar a las cartas.