COMO ANTES ❛꒰ 𝗅𝗎𝖺𝗋 𝗅𝖺 𝗅 ꒱

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JEYLIN OSORIO
𖤐𖤐𖤐

Eso de matar a Raúl estaba en pie.

Han pasado casi dos semanas desde que volvimos a Tampa, que es donde vivo, y Raúl a estado visitando a Jeluar. La verdad me alegra eso.

Pero el muy cabron, en el penúltimo día de grabación, decidió que darme un beso en la boca era la idea más cool. Pues no, porque las salia's esas que también estaban en el set, o sea las modelos, vienen y dicen en una entrevista que vieron a Luar besarse con una de las modelos, nunca dijeron nombre pero si dijeron que seguro no tenía plata y por eso buscaba encajarle un hijo que no es de él a Raúl, porque las muy metiches escucharon a Hades y a Raul cuando estaban hablando del niño.

Ahora, en estos días que ha visitado al niño a intentado mil y un veces hablar conmigo pero la verdad es que me molestó que hiciera esa acción. Por lo que es mi papá el que le pasa el niño y ambos se van a pasear, aunque insiste en que salgamos los tres juntos. Como lo haciamos él y yo antes, pero nada es como antes.

—No podes estar así con él todo el tiempo, en algún momento tendrás que hablar con el cabron ese.— dice la voz de Hades a través del teléfono.

—Angel, es que lo hizo enfrente de todos como si fuéramos novios. Y ni amigos somos, el marico ese está loco, chamo y ahora la gente anda hablando.

—Mera, ¿Esa gente te da de comer, como pa' que te esté importando lo que hablan?, Luar será cabron pero si quiere arreglar las cosas háblalo con él, chica.

—Ya, te dejo porque tengo que ir por mi hijo.

—Dale, baby. Hablamos.

—Chao.

Hades cortó la llamada. Salí de mi habitación para ir a recibir a mi bebé. No tenerlo un par de horas me hace extrañar lo demasiado. Maldito Raúl Armando que se lleva a mi Jeluar.

Abrí la puerta principal encontrándome a Raul con el nene en brazos y la mochilita de él en su hombro.

Mi hijo venía bien dormido, porque soltaba los mini ronquidos que siempre hacia al dormir.

—¡Luar! Mi amor, apúrate.— dijo una chica que estaba en el asiento copiloto del carro de Raúl.

Él no le respondió por estar mirandome. Sin mentir me encabrone y lo peor es que es estupido porque obviamente Luar y yo no somos algo como pa' que yo lo este celando.

—Mañana vengo por él...

Lo interrumpí agarrando a mi hijo y su mochila, cerrando la puerta en su cara, me dio igual. Será su padre pero que me avise si va andar con cuero' para no darle a Jeluar.

No es por ser sifrina pero a mi hijo yo no lo quiero cerca de personas que no aportan a una estabilidad en su vida. Ese tipo de mujeres no son de mi agrado puedo tratarlas por educación pero no quiero que esten cerca de Jeluar y más si anda con el padre.

Me fui a la cocina, mientras escuchaba como mi celular timbraba con cada llamada entrante. No le di importancia, es mi hora con mi hijo y la gente lo tiene que respetar. Sabiendo que el que llamaba era Raúl

Horas más tarde, Jeluar y yo estábamos de vuelta en la cocina listos para comer nuestra rica cena pero sonó la puerta principal por lo que deje un momento a Jeluar con mi celular sentado en su silla para comer.

—¡Voy!— dije caminando hacia la puerta.— Pero ¿Quién carajo molesta a esta hora, por Dios?

Al abrir la puerta estaba Raúl con un par de bolsitas en la mano y la correa de un perro.