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Error estuvo sentado en silencio toda la reunión, no dejaba de mirar al suelo con la vista cansada, escuchando todo como ruido ahogado de fondo, apenas tocaba la taza de café que tenía encina de su mesa de noche. Parecía un zombie, como es el más callado en las platicas simplemente se siente como si no existiera, estaba en modo incógnito con sus amigos ahora.

Cuando escucha su nombre simplemente sale de su pequeño trance con su pulso totalmente acelerado y sudando frío.

---¿Díganme? No estaba prestando atención, perdón...--- Error toma su taza disimuladamente y sopla el café para darle un corto sorbo.

--- Nada, yo...realmente sólo quería decirte que sentía mucho haber discutido contigo ayer, ahora que lo pienso, fue una idea horrible haberte hecho dormir fuera, debiste estar asustado y confundido..--- Ink toca con suavidad el hombro de Error y le dedica una pequeña sonrisa agotada.

Se estaba sintiendo nuevamente de esa forma tan horrible que le hacía sentir que no merecía amigos, amor, y nada bueno en general. Error tenía esta clase de sensación cuando liberaba algo que llevaba cargando consigo bastante, cada vez que abría la boca por un acto de mera impulsividad y desespero.

Ver el rostro demacrado de su pareja le hizo sentir culpa por haber dormido tan bien en una casa cómoda, cálida y llenado buenas personas la noche anterior. Ver a sus amigos de antes ahí preocuparse por él le hizo sentir culpa por encariñarse rápido con un grupo distinto que no conocía de nada.

Error estaba mirando como en blanco a todos. Por su semblante parecía que estaba de mal humor, tocado o shockeado por algo que le molestara, sin embargo, tan pronto como su novio tocó suavemente su mano, sus cuencas dejaron caer gruesas lágrimas mientras su expresión tan pálica se rompía, convirtiéndose en una llena de pura culpa y asco por él mismo.

---¿Error..?--- Ink cambia su rostro a uno lleno de preocupación pura, y tan pronto como siente la mano envuelta en curitas del artista algo en él se quebró aún más, haciéndolo lagrimear aún más, sorprendente mente en silencio.

El azabache se levanta del sillón rápidamente secando sus lágrimas y caminando hacia atrás, en dirección al baño, balbuceando que regresaba en un momento, algo simplemente no estaba bien con él, y siempre se lo repetía constantemente.

La puerta del baño se sobre y cierra con rapidez, él deja su peso recargado en la puerta mientras se pone las manos en la cara y se pregunta mentalmente mil cosas al mismo tiempo y a gritos a modo de regaño para sí mismo. "¿Por qué eres tan egoísta?", "¿Que no ves que eres un patán?", "¿Viste su rostro?", "Ni siquiera pudo descansar anoche por culpa tuya", "Él necesita a alguien mucho mejor que tú", "Deberías aprender a mantener la boca cerrada", "¿Qué pasó con no dejarse llevar?".

Sin darse cuenta estaba en el piso, sobre la alfombra, preguntándose seriamente si de verdad merecía ser llamado "novio" por Ink, la única persona que hasta el momento, y desde siempre, ha aguantado su forma de ser tan parca. ¿Aguantar? ¿Error era realmente alguien tan difícil de llevar? Eso se lo hacía creer desde siempre al recibir esa clase de comentarios a su persona siempre.

Quizás, sólo quizás, esa sea la razón por la que el pobre siempre se autosabotea haciéndose sentir que no merece amor, si es un "ser sin corazón y amargado". Le dolía la cabeza y comenzaba a escuchar taponado gracias a la presión que ejercía sobre sí mismo para calmar su llanto de una vez por todas, la culpa era una de las peores sensaciones que tenía, especialmente luego de conocer a Ink.

--- Error...llevas mucho tiempo ahí, ¿qué haces?--- Era Ink, y sonaba preocupado aún con ese tono de voz tan suave suyo.

--- No...estoy haciendo nada. Por favor no te preocupes por mí.--- El azabache luchaba por recomponerse y disimular que estuvo conteniendo su llanto a medias por unos largos veinte minutos.

---¿Cómo quieres que no me preocupe? Por favor...Cross y Dream ya se han ido, si necesitas hablar sobre algo, aquí estoy...--- El artista pone su mano en la puerta y se agacha casualmente a la misma altura en la que se encuentra Error.

El azabache siente por fin que puede respirar, entonces abre la puerta sin pararse del suelo y es Instantáneamente envuelto en un cálido abrazo por parte de Ink, esto por alguna razón lo hacía sentir peor, no quería decirlo, para este punto ahora teme abrir su boca demás.

--- Lo siento...---

--- No pasa nada, amor...estamos juntos en las buenas y las malas, ¿no?--- El pintor acaricia con suavidad la espalda de Error, quien asiente cabizbajo mientras seca sus lágrimas nuevamente.

---¿Estás seguro de que esto no nos afectará?---

--- Cielo...mientras que sigamos juntos nada malo pasará.---
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Seis de la mañana, era el último día de Error descansando, al día siguiente ya debería prepararse mentalmente para volver al trabajo. Realmente lo distraía de muchas cosas, pero ahora mismo sentía que lo iba a hacer destrozar la poca vitalidad que le quedaba.

Error decidió que se despertaría a esa hora para por fin hacer algo de su vida el día antes de volver a ser un adulto funcional. Tan pronto como lo hace y revisa su teléfono, ve que tiene un montón de mensajes de un grupo de chat al que nunca planeó meterse, así que rápidamente ojea eso.

Resulta que eran sus nuevos amigos, quienes decidieron meterlo para hacer un próximo plan, preciso ese día, por la tarde, claro. Error leía los mensajes con sus cuencas pesadas por el sueño, rasca su nuca y tan pronto lee ciertos mensajes no puede evitar reírse un poco, Killer y Dust eran como payasos pero que sí daban risa.

Su pequeña risa logró despertar a Ink, que estaba al lado abrazando una almohada. Al ver a su novio sonriendo con el teléfono en la mano siente curiosidad y le pregunta confundido qué hace.

---¿Ruru?...¿qué haces amor? Son las seis..--- El pintor bosteza recargandose en la almohada, mirando a su novio mientras parpadea lentamente.

--- Ah...discúlpame, es que unos amigos me agregaron a un grupo, quieren salir a hacer algo hoy..--- Error soba un poco su propia nuca con una pequeña sonrisa aún.

Ink mira al teléfono de Error con una expresión agotada y algo seria.

---¿Son los de la camioneta que te trajeron ayer?---

--- Ajaj, sí, son ellos...¿los...viste?--- El azabache mira con algo de incomodidad a Ink, se sintió algo espiado.

--- Yo...bueno, estaba angustiado ayer, me la pasaba mirando por la ventana a ver si volvías, y me dio algo de miedo las fachas que daban ellos...pero está bien, supongo, si son tus amigos..--- El pintor comenzaba a cerrar sus cuencas lentamente, le estaba ganando el sueño.

Error sentía que su novio comenzaría a tener mini infartos de ahora en adelante gracias al renacimiento de su vida social, y eso no se veía bueno. Una vez más estaba dispuesto a no quejarse en caso de que el pintor comenzara a tener paranoia con ser abandonado o reemplazado.

---¿Y quieres ir...?--- Ink pregunta luego de un corto silencio, a lo que Error responde asintiendo inseguro.--- Bien, bien...aprovecha ahora, mañana ya debes volver al trabajo, ¿no? Hoy me quedaré todo el día en casa por si me necesitas.--- El artista cierra sus cuencas y se da la vuelta en la cama.

--- Ink...¿cuándo debes volver a la universidad?--- Error comenzaba a tener una pequeña sensación de culpa al salir.

--- Mi sustentación es en unos días, hasta entonces no debo hacer nada, sólo pensar en una verdadera obra de arte que impacte y tenga mucho significado...--- El azabache permanece en silencio al escuchar la voz cansada de Ink.--- Ya tengo bastante material sobre donde podría ir comenzando.--- Eso se sintió todavía peor.

El de marcas azules permanece sentado en la cama al menos unos buenos quince minutos, hasta que decide entrar a la tina para darse un baño lento y sin apuros.

➠TARAXACUM - Errorink...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora