No trace (Kelsey Chow & tu)

Capítulo 9

Habían pasado aproximadamente 15 minutos desde que Rachel se había ido, no había rastro de Kelsey, esto debería mantenerme tranquila pero por alguna razón estaba más alterada de lo normal.

-¿Kelsey?-pregunté nerviosa.

Ella no respondió, no estaba o al menos eso creo.

-Ke....Kelsey, ¿estas ahí?

Pregunté por segunda vez, otra vez nada, ya me estaba convenciendo de que ella no estaba aquí.

-Demonios.

Maldije en voz baja con una pizca de desesperación.

Tres golpecitos en mi ventana se pudieron oír.

-Kelsey sal, no estoy de humor para esto-dije nerviosa.

3 golpes más.

-Kelsey detente, no podemos... ¿hablar?, no sacas nada haciendo esto.

No se escuchaba ni un susurro, vi la hora, eran 30 para las 7 y aun no llegaba Louis.

-¿Kelsey sigues ahí?

No la escuchaba, enserio no la escuchaba pero sentía una presencia, la vibra no era igual, era algo pesada diferente a la de Kelsey que era más de tensión, para mi gusto algo oscura no como la de Kelsey que era de un sutil gris.

-¿Louis, eres tú?

Nada.

-Louis, odio las bromas.

Nada, lo más probable es que sea imaginación mía.

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Me encaminé al living con un vaso de agua, faltaban sólo 15 minutos y Louis me había llamado para decirme que venía en camino.

Kelsey no había aparecido, la presencia de que alguien más estaba, se desvaneció por un momento.

Mañana sería lunes y el infierno del colegio volvía a acercarse.

Deje de pensar en eso y tomé un sorvo de mi agua.

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Unos brazos se posaron en mi cuello, no podía respirar, me dolía mucho.

-¡KELSEY!-grité.

-Idiota-dijo burlonamente una voz desconocida.

No era Kelsey, él, él no era, mierda, Kelsey no estaba ahí, ¿Qué es eso?

El oxígeno no entraba a mis pulmones, no veía muy bien, sentía que en cualquier momento me iba a desmayar.

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Había dejado su figura visible en mi presencia, lastimosamente mis ojos no me brindan el apoyo suficiente para distinguirlo, cabello café castaño, era algo alto pero no robusto y una sonrisa que deja más miedo que alegría, nada más que eso pude ver, con la excepción de un pequeño susurro "muerete, muérete, muérete".

Estaba apunto de desmayarme.

-Kel...Kelsey ayúdame...por...por favor-dije con un hilo de esperanza.

Los ojos de aquel hombre se abrieron como platos soltándome y dejándome caer al piso, con la poca visión que me quedaba la vi, Kelsey lo tenía acorralado con expresión tranquila y sosteniéndolo del cuello un poco más arriba del suelo.

Fue lo último que vi antes de desvanecer, ¿ella vino a salvarme?