Bluey's fantastic primary

Sanando Juntos

-Ya era casi de noche y Bluey había llegado a su casa, junto con sus padres. Bluey tenía una expresión que dejaba en claro su estado de ánimo deprimente y aún en shock, tras lo que había vivido, el ver como, su mejor amigo para ese momento, era en realidad una persona tan horrible en su interior, la hizo sentirse bastante asustada y a la vez decepcionada. Cuando bluey bajo del auto, vería como Judo estaría jugando en el jardín con Bingo, quién al darse cuenta de su presencia, correría a abrazar a su hermana-

Bingo: Bluey!! Es bueno verte jsjs, aunque no sé por qué volviste con mamá y papá, cómo te fue en tu cita?^^

-Diría la peli naranja de forma inocente, desconociendo completamente todo lo que había pasado, algo de lo que Bluey se daría cuenta rápidamente-

Bluey: Bueno... Estuvo bien, aunque no tengo muchas ganas de hablar, estoy algo cansada...

-Bluey prefirió no preocupar a su hermana ahora, ya se lo contaría más tarde, además de que no quería volver a revivir ese momento tan traumático, al menos no tan pronto-

Bingo: Oh, está bien... Entonces te veré luego

Bluey: Sí, te veré adentro...

-Bluey estaría entrando a su casa, pero en eso Judo iría con ella para intentar hablarle y disculparse. Ella en ese momento tampoco sabía lo que había hecho Jean con exactitud, pero supondría un poco de lo ocurrido-

Judo: Espera! Bluey, podemos hablar?...

Bluey: Yo...

-Bluey miraría a Judo por unos segundos, teniendo pequeños espasmos de cuando "supuestamente" la había espiado junto con Mackenzie y del cómo Jean Luc en su desesperación gritaría sobre la manipulación de él hacía Judo-

Bluey: No... Lo siento, no quiero hablar ahora....

-Sin decir más, Bluey entraría a su casa y rápidamente subiría hasta su habitación, empezando a llorar en su cama de forma desconsolada. En ese momento sentía mil y un emociones y no podía entender ni una sola de ellas, sentía enojo, tristeza, decepción, culpabilidad, miedo, ansiedad, estupidez y entre muchas más que hacían que se sintiera horrible, todo ese dolor psicológico se transmitía de forma física a través de un intenso dolor en su pecho y cabeza. Era simplemente demasiado para una niña de su edad, que lo único que entendí en este momento era que sentía una profunda tristeza, cosa que perduraría hasta la mañana siguiente, en donde sería despertada por su despertador-

Bluey: Hmm... Ahg... No quiero ir a la escuela...

-Era un lunes, Bluey se sentía de la peor manera, por lo que simplemente apagaría su despertador y se volvería a acostar, pero entraría Chili a su cuarto-

Chili: Hola, cómo vas cariño?

Bluey: Hola mamá... No muy bien...

Chili: Me imagino, te estamos esperando para tomar el desayuno abajo, yo le explicamos a bingo lo que pasó, así que quiere verte

Bluey: Gracias mamá, bajaré en un momento...

Chili: Sí...

-Chili se acercaría a la cama de su pequeña y se sentaría en el borde de esta-

Chili: Sabes, hablé con tu padre creo que lo mejor será que te quedes aquí hoy, no tienes que ir a la escuela si no quieres

Bluey: En serio? Muchas gracias mamá, te quiero mucho

-Bluey se aliviaría un poco al escuchar que no tenía que ir a la escuela y abrazaría a su madre, cosa que ella correspondería con bastante efecto y amor maternal-