RECOGI UN ALFA (ABO)

Capítulo 1 Recogí un alfa

El bistro llamado "Qiyuan" finalmente despidió a su último cliente a las dos de la mañana. Después de una simple limpieza, Wu Yao pudo terminar su día de trabajo. Se quitó el delantal, metió el arroz frito restante en la cocina en cajas de comida rápida y lo llevó en sus manos. Después de cerrar la puerta, caminó hacia su alojamiento.

Como el último planeta entre todas las galaxias habitadas por humanos, Tail Star casi no tiene infraestructura. Nunca ha habido rastros de farolas instaladas a ambos lados de la carretera. Cada camino está lleno de baches al caminar, además de depender de la carretera. Energía emitida por la luna. Fuera de la luz, todo depende de tu familiaridad con las condiciones de la carretera.

Wu Yao ha estado caminando de un lado a otro por este camino durante siete años, por lo que ciertamente está familiarizado con las condiciones del camino. Evitó hábilmente los baches más grandes y pasó por los callejones sin problemas. A medida que el olor a descomposición se hizo más fuerte, finalmente llegó a su destino.

Montaña de basura.

La enorme cosa estaba frente a nosotros, aunque la luz de la luna fuera clara, no podía iluminar toda la imagen. Sólo el olor complejo que se extendía era inolvidable. En otros planetas, sería un lugar que la gente evitaría, pero en la estrella de la cola es el lugar más popular. Aunque está sucio y huele mal, cada vez que se llena, los residentes locales se hacen ricos. Las cosas que la gente descarta y desdeña en los planetas de alta gama, como botellas de vidrio, cajas de papel usado y agujeros en la ropa... se consideran tesoros aquí. De vez en cuando, la gente se pelea por el mismo trozo de basura.

Los planetas de alta gama solo transportan una gran cantidad de basura aquí una vez al mes. La fecha es a principios de mes, cuando el lugar está lleno de humanos. Pero ahora estamos a mediados de mes y la gente ya ha recogido cosas valiosas, por lo que la escena desolada ha vuelto a ser lo que debería ser.

Wu Yao llevaba una máscara y hacía tiempo que estaba acostumbrado al olor de este planeta, por lo que su expresión se mantuvo sin cambios en todo momento. Caminó familiarmente hasta un arbusto y tropezó con algo que yacía en el suelo, pero no se detuvo. Wu Yao se puso en cuclillas y sacó la caja de bocadillos de la bolsa de lona y dijo: "Mimi".

Después de ladrar varias veces, un gato atigrado salió como un fantasma, le "maulló" un par de veces con voz alegre y entusiasta y se frotó contra el dorso de su mano.

Cuando el suave pelaje lo frotó, finalmente apareció una sonrisa en los ojos fríos del joven bajo la luz de la luna. Extendió la mano y frotó la cabeza del gato. El gato se acostó frente a él y expuso su vientre sin estar preparado. Después de la reunión, se detuvo y dijo: "Primero deberías comer".

Naturalmente, los desperdicios de comida se incluyen en la basura que se transporta. El viaje es demasiado largo y el clima es caluroso. La mayor parte ya está rancia o enmohecida cuando se entrega. Los afortunados son recogidos primero por los humanos para llenar sus estómagos. Los animales salvajes pueden. La cantidad que agarré fue muy pequeña, sin mencionar que el gato frente estaba cojo y tenía poca capacidad de lucha, por lo que solo podía morir de hambre la mayor parte del tiempo.

En las zonas pobres, incluso las ratas son feroces y no temen a los gatos.

Cuando Wu Yao lo descubrió por primera vez, ya se estaba muriendo de hambre. Wu Yao le dio media porción de arroz frito y luego se convirtió en una mascota de corral.

El gatito comenzó a tragar la comida a grandes tragos. El arroz frito de "siete yuanes y medio" fue hecho por Wu Yao. Su artesanía no era muy buena, e incluso era un poco desagradable, pero la porción era grande y barata. , por lo que todavía había mucha gente pidiéndolo todos los días. Pero sobraba un poco más o menos todos los días. Wu Yao lo usaba para llenar su propio estómago y el resto lo usaba para alimentar a los gatitos.