TROUBLEMAKER | CILLIAN MURPHY

008 (especial)

capitulo anterior siendo narrado desde la perspectiva de cillian.

los últimos días había estado muy cerca de blair, más de lo que un profesor debería.

no sabía porque, simplemente me gustaba estar con ella, sus conversaciones llenas de sarcasmo y su mirada desinteresada pero tan interesada a la vez. también, me di cuenta de cosas que no había notado antes: el cómo cada que está nerviosa toca su brazalete, cómo casi siempre sus dedos o su mochila están manchados de pintura por lo cual se ve que le gusta pintar, las rimas casuales que suelta con tono de superioridad y una infinidad de cosas más.

cuando me ofrecí ayudarla con su trabajo no imagine las repercusiones que tendría en mi vida y en mis emociones. el primer día me había ofrecido a llevarla a casa no imagine el efecto domino que tendría.

aún tengo plasmado en mi mente el momento en el que se inclino hacia mí y depósito un lento beso en mis labios, me quedé estático. había imaginado ese momento miles de veces y lo había guardado en lo más profundo de mi memoria.

al día siguiente del beso no supe como verla a la cara, no sabía cómo lidiar con lo que había pasado pero claro que quería verla, quería ir corriendo con ella darle un beso a medio pasillo y volver a sentir su labial de cereza. me sentía como un tonto adolescente de los que tanto me burlo.

al verla por los pasillos no pude evitar girar hacía el lado opuesto e incluso bajaba la cabeza cuando pasaba a su lado. cuando tuve clase con ella estaba nervioso, necesitaba escuchar su voz pero ella ni me había volteado a ver así que, utilicé mi puesto de profesor.

— blair, empieza tu —dije pidiéndole que iniciara la lectura, ella me dio una mirada confundida antes de empezar.

me dio gusto escuchar su voz, fue cómo quitar un peso en mis hombros que ni yo sabía explicar.

la clase continúo, me era imposible quitar mi mirada de ella, sabía que tal vez ahora estaba enojada conmigo, había sido un idiota en todo el día y ahora simplemente la pongo a leer. eso fue patético hasta para mí.

al terminar la clase ella se quedo un momento más guardado sus cosas, era mi oportunidad.

—podemos hablar, blair —dije acercándome a ella. nervioso.

— si —dijo dándose la vuelta hacia mí—¿que pasa?

— lo siento —enseguida me disculpe — tienes que entenderme, blair —pedi.

—yo también lo siento, fue un error — escucharla decir eso me hizo quedarme quieto en mi lugar.

—¿que? —dije confundido — ¿de que hablas?

— sabes de que hablo, de la razón por la cuál me has estado ignorando, seguramente tu también piensas que fue un error, y está bien, lo entiendo —dijo mientras mantenía un fuerte contacto visual conmigo.

— blair, no fue un error, perdón por ignorarte —suspiré  — es solo que tienes que entender, eres menor que yo y mi alumna — dije, sentía mi respiración pesada al no poder expresar bien lo que sentía.

— eso para mí no es un problema —dijo casi en un susurro — ¿para ti realmente lo es? — iba a responder cuando sentí su mano entrelazar la mía, baje lentamente la mirada encontrando su mano dando caricias en la mía

—blair... —su nombre salió de mi boca casi en un suspiro.

—vamos, cillian, se que también quieres esto — escuchar mi nombre salir de su boca hizo que bajara todas
mis defensas, estaba a su merced

finalmente, se acerco a mi besándome nuevamente, igual que el anterior me quedé estático los nervios me querían ganar, pero finalmente llevé una mis manos a su cintura y la otra a su mandíbula profundizando el beso y acercándola más a mí.

—¿entonces? — pregunto mientras se separaba de mi.

—quiero estar contigo, blair —dije honestamente  — pero hay que ser cuidadosos e ir despacio antes de querer intentar dar un paso más, ¿si?
— dije con una sonrisa mientras la abrazaba por los hombros para empezar a caminar.

— lo se y entiendo, cillian —dijo con una sonrisa mientras caminabamos  — solo que realmente me gustaría ser algo más que esto .

— ¿te llevo a casa? —dije intentando dejarlo hasta ahí.

— claro — ambos empezamos a caminar a mi auto.

estar ahora juntos, solos. se sentía diferente, ya éramos algo más que alumna y profesor y eso me ponía más feliz, sabía que moralmente estaba mal, pero no podía hacer nada contra mis sentimientos ni ella con los suyos

después de una corta conversación sobre cigarrillos, tome el valor de pedir su número de teléfono, con una sonrisa me extendió su teléfono para me guardará.

—te veo mañana —se despidió una vez que llegamos a su casa y le extendí su teléfono —te mandaré mensaje, adiós — se acerco a mi depositando un beso en mi mejilla, yo hice lo mismo.

manejé con una sonrisa a mi casa.

nota de la autora.

debo confesar que escribir este capítulo me gusto mucho, espero que les guste a ustedes también.

no olviden dejar su estrellita, me inspiran a seguir.

—rain.