Capítulo 12: La Exposición Dorada

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Mañana empiezan los exámenes Chunin". Pensé mientras me recostaba en la silla. Me encontraba en la azotea de nuestra casa y era un día soleado, quizá hacia las 11:00 de la mañana, con nubes moteadas moviéndose por el cielo. En mi mano estaba el pergamino que Danzo me dio sobre el estilo de taijutsu del Clan Hyuga y cómo su doujutsu funciona en tándem con dicho estilo de lucha. Con la llegada de los exámenes, los negocios de toda la aldea se dispararían debido a la afluencia de gente que vendría a ver el espectáculo. Aunque el evento principal no tuviera lugar hasta dentro de un mes o así. Mis ojos siguieron las nubes blancas hasta que oí abrirse la puerta del tejado.

"Qué rápido". Dije sin mirar a quien se me había unido. Yui no contestó y se limitó a sentarse en la silla que había a mi lado. Por supuesto, me refería a su misión de entrenamiento/Rango D. Sus ojos miraban al cielo, como los míos, mientras permanecíamos en un apacible silencio durante un rato. Sin mirarla siquiera, supe que estaba estresada y sumida en profundos pensamientos.

"¿Naruto?" dijo Yui por fin en voz alta antes de mirar hacia mí. "¿Puedo hacerte una pregunta?"

"¿Hmm...?" Respondí sin mirar.

"¿Crees que estoy preparado para presentarme a los Exámenes Chunin?".

"..." ¿De verdad? Probablemente podría con el entrenamiento de Minato respaldándola, pero Yui también podía salir adelante a menudo con pura fuerza de voluntad y determinación. Era peligrosa, seguro, pero con los efectos curativos del Kyuubi reducía un poco ese peligro. Según mis observaciones, nuestro padre había querido que el crecimiento de Yui como ninja progresara orgánicamente. Por supuesto, hizo que los fundamentos de Yui fueran tan afilados como un clavo, y la ayudaría si alguna vez se lo pedía, pero por lo demás Yui tenía que decidir cómo quería progresar como shinobi. "¿Por qué lo preguntas?"

"En nuestra reunión de equipo de esta mañana, Kakashi-sensei nos preguntó si creíamos estar preparados para afrontar los exámenes. Si no era así, se nos permitía no presentarnos y dejar que el resto del equipo se presentara". explicó Yui antes de volver a mirar al cielo con sus ojos azules.

"¿Y los demás? ¿Qué han dicho?

"No mucho. Saya se fue sin decir una palabra, y Sakura poco después". Lo más probable era que Saya entrara porque era otra montaña la que se interponía entre ella e Itachi. Sakura, en cambio, era otra historia.

"¿Te sientes preparada?" pregunté cuando por fin miré a mi hermana vestida de naranja.

"Sí, lo estoy. Me siento capaz de afrontar los exámenes Chunin". respondió Yui antes de mirarme con una sonrisa.

"Entonces estás preparada". La sonrisa de Yui creció cuando las palabras salieron de mi boca. "Asegúrate de que tu equipo también esté preparado".

"Pero Kakashi-sensei dijo que nos reuniéramos en el primer campo de pruebas mañana por la mañana si creemos que estamos preparados". Yui se levantó y estiró los brazos por encima de la cabeza.

"¿Dijo que podríais hacer la prueba vosotras solas?". Yui asintió a mis palabras, haciéndome fruncir el ceño. "Interesante..."

"¿Qué cosa?" preguntó Yui, pero le toqué el estómago mientras se estiraba. Se calló y me lanzó una mirada burlona. "¡Eh!"

"No es nada". Me levanté de la silla y también me estiré. "Ya que has terminado por hoy, ¿quieres comer algo?".

"¡Creía que nunca me lo pedirías!". Yui me cogió de la mano y empezó a arrastrarme escaleras abajo. Justo había conseguido tirar el pergamino que llevaba en la mano a mi habitación mientras pasábamos.

"Pero con una condición". Mi hermana me miró mientras caminábamos hacia la Calle Mayor. "Nada de ramen". Se le desorbitaron los ojos y retrocedió un paso, conmocionada.

Naruto - El fantasma de la hojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora