Encuentros

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A la mañana siguiente, Hyacinth se instaló en la ventana esperando a que Penélope volviera, pero, nunca vio aparecer ninguno de los coches Featherington. Incluso fue a regañadientes con su madre a la modista, ya que iban a buscar los vestidos que habían encargado para esta nueva temporada. Lo que no sabían es que sus vecinas, en realidad, habían llegado durante la madrugada. Esa mañana, Penélope se despertó con una determinación, debía hablar con Anthony y no estaba dispuesta a esperar a que él fuera a golpear su puerta. Tal como le dijo su tía, debía arriesgarse. Tenía de excusa su novela, a Eloise. Simplemente, necesitaba ir a la casa de enfrente y lograr encontrar un momento para poder hablar con él. Mientras se llenaba de fuerzas mirando por la ventana, vio salir a las mujeres Bridgerton... "Seguro irán a la modista, es mi oportunidad." En eso, su corazón dio un vuelco, ya que también vio salir a Benedict con Gregory, ellos tomaron el camino contrario. "Es ahora". Bajó las escaleras y le avisó a su madre que iría a ver a Eloise, pues ella la estaba esperando. Salió de su casa, cruzó la calle y al llegar a la casa Bridgerton, su mayordomo la dejó entrar como era la costumbre. Le avisó que habían salido, pero que podía esperar a las señoritas. Penélope sonrió y aviso que estaría en la biblioteca. Pero, sus pasos se desviaron con valentía al despacho del vizconde. Mientras se iba acercando, logró escuchar una discusión. Era Colin. En todo este tiempo no había pensado en él. 


-Ya te lo dije Anthony. Para mí Pen no significa nada más que una hermana. No siento ni podré sentir jamás algo por ella. Es mi mejor amiga, por todos los cielos. -Respondió con un dejo de cansancio.

-Entonces, está decidido. 

-No, no lo está. No puedes simplemente cortejarla.

-Colin. solamente me iba a alejar y dar un paso al costado si tú sentías algo por ella. Sino es así, avanzaré. 

-Anthony esto... Esto está mal, ella es como nuestra hermana. 

-No, no lo es. Penélope es una mujer en edad casadera y estoy seguro de que, si ella acepta, sería una increíble vizcondesa. Colin, estoy dispuesto a hacerla feliz. ¿Prefieres que tu amiga se case por amor o con algún idiota que no le dé el trato que ella merece? Te lo preguntaré una vez más y esta será la última. Colin, ¿Planeas cortejar a Penélope esta temporada?

-No, por supuesto que no. 

-Creo que su postura ha quedado bastante clara. -Respondió Penélope entrando al despacho. 

-Pen -Dijo Colin con sorpresa. 

-Penélope -Dijo Anthony quedando absolutamente desarmado ante ella. 

-Pen, lo siento. Yo no... yo no quería lastimarte.

-No me lastimaste. Yo puedo decir abiertamente que no me casaré con Benedict y él tampoco se sentiría lastimado. Quiero que quede claro. En ningún momento te pedí que nos casáramos o que me cortejarás y, sin dudas, es algo que no planeo hacer y que no quiero hacer. -Al decir esto último, miró con complicidad a Anthony. 

Colin estaba petrificado. La mujer que acaba de entrar al despacho de Anthony, no era la frágil Pen que él recordaba del último baile. Era, para empezar, una mujer. Había quedado sin palabras, no podía dejar de observarla. ¿Siempre había sido así de hermosa? ¿Sus ojos siempre habían tenido esa intensidad? Su pelo caía coquetamente como una cascada por su hombro derecho y se posaba en sus pechos... sus enormes pechos. Comenzó a salivar y no podía emitir una palabra. 

-Colin, hermano, por favor, nos puedes dejar a solas. -Solicitó Anthony en un tono amable, mirando a una Penélope que ya se había sentado frente a él en el escritorio. 

-No. -Respondió para sorpresa de los presentes. 

-¿No? -Preguntó Anthony

-No, por supuesto que no. Serviré de chaperón. -Dijo, aclarándose la voz. 

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⏰ Última actualización: Sep 19 ⏰

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