¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
______________1_______________
Año 2004
Hannah y Max tenían un sueño, el neerlandés quería ser piloto de formula 1 y la Italiana una modelo reconocida, ambos niños soñaban con eso y querían cumplirlo aunque sus demás compañeritos se burlaran de ellos.
Una niña pelinegra de siete años, desayunaba tranquilamente en las bancas de su colegio, su madre siempre le daba frutas rojas con crema, comió uno fresa y al ver a Max sonrió ampliamente y se hizo a un lado para que él se sentara.
—¿Por qué no viniste ayer Maxie?, estuve sola.
—Perdón Hannah, tenía que ir al Karting y papá habló con la directora pero te prometo que ya no faltaré, te llamé al celular de tu madre.
Ella suspiró.
—Mamá me castigó porque no quise hacer la tarea, pero ayer pudo ir a un desfile de moda — sus ojos brillaron al contarle —Fue increíble Max, no veo las horas de que yo sea grande para ser una modelo.
—Serás la más bonita.
Se ruborizó y sonrió.
—Yo seré un piloto de la formula 1, seré campeón y tú serás mi novia.
—¡¿Tú novia?!, eso es malo.
—Lo es, pero cuando seamos grandes no será malo porque ya seremos adultos.
La niña rascó su cabeza y asintió para así darle de su desayuno al rubio. Al ver a los demás niños acercarse, ambos se levantaron rápidamente para irse pero fueron detenidos por ellos.
—¿A dónde van?
—Déjalos Pablo — se rió Leo —De seguro se van a seguir soñando, uno que es piloto y la otra que es modelo.
Verstappen hizo puño sus manos y se paró frente a Hannah.
—Dejen de molestarnos si no quieren que yo los golpee.
—Uy, uy, el pilotito nos golpeará.
Se rieron y la niña los miraba feo.
—Mejor váyanse de aquí a soñar a otro lado — se burlaron —Porque eso solo en sus sueños, nunca serás piloto Max, ya lo voy a ver detrás de un escritorio y a Hannah siendo como las demás mamás, amas de casa, eres una niña tonta.
El rubio apretó sus ojos y goleó al niño para luego empujarlo sorprendiendo a la italiana quien abrió sus ojos como plato al ver a Leo en el pasto con sangre en su labio.
