Sinners

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Build recordó lo que lo impulso a hacer aquella noche, después de su primer aniversario.

Esa noche, mientras las luces se apagaban en el hotel, la conversación se tornó en una discusión. Build, cansado de las inseguridades de Bible, propuso hacer una pausa en su relación.

“Necesitamos espacio para ver lo que realmente queremos”, dijo, y las palabras cayeron como un eco, resonando en el silencio de la habitación.

Bible se sintió devastado, pero una parte de él sabía que no podía seguir así. “Está bien”, contestó con voz temblorosa, sintiendo cómo se desvanecía algo fundamental en su vida.

El tiempo pasó. Ambos estaban en la cúspide de sus carreras, pero la soledad se instaló en sus corazones. Las redes sociales reflejaban ese distanciamiento; dejaron de seguirse, cada uno tratando de superar el dolor a su manera.

Build se sumergió en proyectos, pero cada éxito lo dejaba sintiéndose vacío. La fama le sonreía, pero a menudo miraba su teléfono, esperando un mensaje de Bible que nunca llegaba. Por su parte, Bible se dedicó a su actuación, la nueva serie a la que pronto se emitiría, lo videoclips a los que participaban  siempre tocaban temas  de desamor y añoranza, pero la tristeza era un peso que lo acompañaba en cada filme de la escena

Un día, mientras preparaba un nuevo álbum, Bible vio una foto de Build en la prensa, sonriendo junto a Wave en otro evento. El nudo en su estómago se apretó nuevamente. Era difícil de ignorar; ambos seguían adelante, pero su pasado seguía persiguiéndolos.

La distancia no solo era física, sino emocional. Sin embargo, en lo más profundo, ambos sabían que el amor que compartieron aún estaba latente, como una chispa esperando ser reavivada.
O al menos eso creía, cuando vio que el  ya no le escribía.
.

Mientras tanto, Wave, al notar la tristeza de Build, decidió que necesitaba hacer algo para ayudarlo a distraerse. "¿Qué te parece si hacemos un viaje a Disneyland? Podríamos invitar a tu familia, así será más divertido", sugirió con una sonrisa genuina.

Build, aunque dudoso, aceptó la propuesta. La idea de escapar de la presión y las tensiones que lo rodeaban era tentadora. Así, una semana después, se encontraron en el mágico mundo de Disneyland, rodeados de risas y colores.

Mientras caminaban por el parque, Wave se esforzaba por mantener la conversación ligera y divertida. La alegría de sus sobrinos resonaba en el aire, y Build no pudo evitar sonreír al ver a Wave interactuar con ellos. Tenía un talento natural para conectar con los niños, haciéndolos reír y olvidarse de sus miedos. Esa habilidad despertó en Build una reflexión sobre el futuro; lo imaginó como un buen padre, lleno de amor y paciencia.

De repente, se encontraron frente a una atracción que parecía emocionante: una gran rueda que subía y bajaba. Build sintió un cosquilleo de ansiedad, pero no quería parecer miedoso frente a Wave. Se animó a subirse, pensando que tal vez la adrenalina lo ayudaría a relajarse.

Una vez en la cima, la vista era impresionante, pero el movimiento comenzó a hacerle dudar. A medida que la rueda descendía rápidamente, Build se aferró a la barra, sin darse cuenta de que había tomado también la mano de Wave. Un calor se extendió por su rostro cuando se dio cuenta de su error, y su corazón latía desbocado.

Wave sonrió, sin hacer alarde de la conexión que se había formado entre ellos. “No te preocupes, a mí también me da un poco de miedo”, dijo, tratando de restarle importancia a la situación. Pero en el fondo, disfrutaba de la cercanía, sintiendo cómo la tensión en el ambiente se disipaba un poco.

Al llegar a la base, Build soltó la mano de Wave, sintiéndose avergonzado. Sin embargo, la risa y la alegría de sus sobrinos lo hicieron olvidar la incomodidad. Wave se inclinó hacia ellos, contando chistes y haciendo caras graciosas, y Build no pudo evitar admirarlo. La forma en que Wave iluminaba el rostro de los niños era algo especial; su corazón se llenó de un cálido anhelo.

“¿Sabías que eres muy bueno con los niños?”, le dijo Build en un momento de sincera admiración.

“Es fácil cuando son tan divertidos”, respondió Wave con humildad. Pero algo en su mirada hizo que Build sintiera un nuevo destello de conexión.

A medida que pasaban las horas, la tristeza de Build se desvaneció un poco. Sin embargo, al final del día, mientras se despedían de Disneyland, la realidad de su situación regresó como un eco persistente. Aunque se divertía con Wave y su familia, en el fondo seguía extrañando a Bible, preguntándose si realmente había perdido la oportunidad de algo hermoso.

Wave, al notar la melancolía en su rostro, lo miró con preocupación. “¿Estás bien? Sabes que estoy aquí para lo que necesites”, le dijo, sincero.

Build asintió, agradecido por su apoyo, aunque su corazón seguía dividido entre la emoción del presente y el dolor del pasado.

🌊💙

Esa noche, la familia de Build decidió irse temprano al hotel, dejando a sus sobrinos emocionados por el día lleno de aventuras. Build, aún con la adrenalina del parque en su sistema, se quedó en el vestíbulo con Wave, quien se veía relajado y contento.

“Podríamos pedir algo para cenar al hotel”, sugirió Build, pensando en la comodidad.

Su hermana, al pasar junto a ellos, se detuvo y le susurró a Build: “Aprovecha y date una oportunidad con Wave. Creo que es mejor para ti”. Su mirada era profunda, como si viera algo en Wave que él mismo no había reconocido.

Build sintió un nudo en el estómago. ¿Sería posible? Pero antes de que pudiera responder, su hermana se despidió y se marchó, dejándolo con sus pensamientos.

Wave, ajeno a la conversación, sonrió. “¿Qué te parece si vamos a cenar a un lugar cercano? He oído que hay un restaurante excelente en la esquina”, propuso.

“Claro, suena bien”, aceptó Build, intentando dejar de lado las dudas.

Al llegar al restaurante, la atmósfera era acogedora. Wave pidió una botella de vino y, a medida que las copas se llenaban, la conversación fluyó naturalmente. Hablaban de trabajo, de sus carreras y de cómo ambos estaban comprometidos con causas filantrópicas. Wave compartió su experiencia ayudando a fundaciones que apoyaban a niños y familias en situación de vulnerabilidad.

“Siempre he creído que debemos devolver algo a la comunidad”, dijo Wave con pasión. “Me gustaría implementar programas que lleguen a más personas necesitadas. La idea de poder ayudar a cambiar vidas es lo que me motiva”.

Build lo miró con admiración. Había algo genuino y noble en Wave que lo atraía cada vez más. “Eso es increíble. Me encantaría involucrarme más en eso”, respondió, sintiéndose inspirado.

A medida que avanzaba la cena, el vino comenzaba a hacer efecto en Build. Rió más, se sintió más suelto y, en un momento de espontaneidad, sus ojos se encontraron con los de Wave. La conexión entre ellos se volvió palpable.

En un arranque de valentía, y con un poco de alcohol en el sistema, Build se inclinó hacia Wave y, sin pensarlo dos veces, lo besó. Fue un beso suave pero cargado de emoción, un instante que parecía detener el tiempo.

Wave se quedó sorprendido, pero pronto respondió, sus labios moviéndose con la misma intensidad. Todo el peso de la confusión y la tristeza de las últimas semanas se desvaneció, dejando solo la calidez de ese momento.

Cuando se separaron, Build sintió una mezcla de euforia y nervios. “Lo siento, no debí…”, comenzó a decir, pero Wave lo interrumpió.

“Está bien. No tengo problema en esto, Build”, respondió Wave con una sonrisa tranquila. “Quizás es lo que ambos necesitábamos”.

Build se sintió aliviado y asustado a la vez. Esa conexión, aunque inesperada, había despertado algo en él que había estado dormido desde su ruptura con Bible.

Sin embargo, el eco de su pasado aún resonaba en su mente. Mientras continuaban la noche, ambos sabían que la situación era compleja, pero había un nuevo camino por explorar, uno lleno de posibilidades.

Continuará

Jealousy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora