Capitulo Uno: La Noticia

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Capítulo Uno: La Noticia

El viento soplaba con fuerza en Córdoba, arrastrando consigo hojas secas y un murmullo de inquietud que se colaba en cada rincón de la ciudad. Martín, sentado en su pequeño departamento, observaba cómo la niebla se cernía sobre las montañas, ocultando el mundo que solía conocer. La crisis creativa que lo ahogaba se había convertido en un silencio ensordecedor, uno que ni las palabras más sutiles podían romper. La pantalla de su computadora seguía en blanco, reflejando su estado mental; el cursor parpadeaba, burlándose de su incapacidad para escribir.

El día había comenzado como cualquier otro, pero había una tensión en el aire que le resultaba extraña. De repente, el sonido del teléfono rompió la quietud, un timbre que resonó con un eco ominoso. Era su madre. Su voz temblaba con una gravedad que lo hizo erguirse de inmediato. "Martín, tenemos que hablar. Es sobre tu abuelo".

No necesitó que le dijeran más. La inquietud en la voz de su madre fue suficiente para que su corazón se encogiera. "¿Qué le pasa?" preguntó, casi sin aliento.

"Lo han diagnosticado con cáncer de páncreas. Avanzado. Los médicos dicen que no le queda mucho tiempo", le reveló su madre, y el mundo de Martín se desmoronó en ese instante. Sentía que el aire se le escapaba, como si esa noticia lo hubiera dejado sin fuerzas.—No... —susurró, sintiendo que una sombra se cernía sobre su pecho.

Colgó, el sonido del teléfono resonando en el vacío. Era una sensación extraña, el peso de la pérdida que ya se acercaba, pero también el eco de una historia que aún estaba por contar. Mientras miraba por la ventana, sintió una punzada de nostalgia. Su abuelo siempre había sido una figura enigmática, un hombre de pocas palabras pero de profundos silencios que llenaban la habitación de historias nunca contadas.

Un par de días después, la noticia lo llevó a viajar hacia el pueblo donde su abuelo había vivido toda su vida. El camino serpenteaba por las sierras, con sus laderas cubiertas de vegetación silvestre y la niebla espesa que daba al paisaje un aura de misterio. Las montañas, tan imponentes y antiguas, parecían contar su propia historia, una que Martín no había tenido el valor de explorar antes.

Al llegar a la casa familiar, el olor a madera envejecida y el leve rastro de hierbas secas lo envolvieron como un abrazo familiar. La casa estaba desordenada, como si su abuelo hubiera estado tratando de organizar su vida antes de marcharse. Martín recorrió los espacios con la mirada, sus ojos deteniéndose en fotos descoloridas que adornaban las paredes: su abuelo en su juventud, fuerte y vital, rodeado de amigos y familia.

La casa estaba llena de recuerdos, y cada rincón parecía susurrar secretos. El reloj en la pared marcaba un tiempo que parecía haberse detenido. Los muebles, cubiertos de polvo, aguardaban pacientemente, como si esperaran el regreso de los que alguna vez los habitaron. Todo en aquel lugar evocaba una nostalgia palpable que se enredaba con la tristeza.

Su madre lo recibió con lágrimas en los ojos y un gesto que lo invitaba a acercarse. "Está en el dormitorio", le dijo en voz baja. La habitación estaba a oscuras, con la única luz de una lámpara que luchaba por iluminar la penumbra. Allí, su abuelo yacía en una cama antigua, sus rasgos marcados por la enfermedad, pero su mirada seguía brillando con una lucidez que sorprendía.—Martín —murmullo, extendiendo una mano temblorosa. El periodista se acercó y tomó su mano entre las suyas, sintiendo el frío de la piel que solía ser cálida.

—Abuelo, ¿Cómo te sientes? —la pregunta sonó hueca en el aire denso de la habitación.—Como un viejo roble en medio de una tormenta —contestó con una sonrisa que apenas lograba dibujar, como si el mero acto de hablar le requiriese un esfuerzo monumental. Martín sintió un nudo en la garganta. Su abuelo había sido siempre un bastión de fortaleza, un hombre que había enfrentado las adversidades con una sonrisa. Verlo en ese estado era un recordatorio brutal de la fragilidad de la vida.

Sombras en el vientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora