Lisandra, notando el cambio en la conversación, se volvió hacia Cristóbal. - ¿Y qué tal si tratamos de disfrutar de la noche, sin pensar demasiado en las cosas complicadas?
Cristóbal asintió, intentando relajarse. - Supongo que tienes razón.
Mientras Annie se acercaba a Luis y a los otros, sintió cómo la mirada de Michel seguía fija en ella. Sin embargo, su mente seguía en Cristóbal y en la situación incómoda con Lisandra.
Luis presentó a Annie a los nuevos conocidos: Angie la pareja de Felipe y Michel. Michel, con su actitud encantadora, le dio un saludo exageradamente formal a Annie.
- Encantado de conocerte, bella dama. - Michel sonrió, haciendo que Annie se riera.
- Igualmente, Michel. - respondió Annie, con una sonrisa
Annie notó cómo la tensión entre Michel y ella se hacía más evidente, así como la incomodidad de Cristóbal. Intentó aligerar el ambiente.
- Bueno, ¿qué tal si pones algo de música? - sugirió Annie con entusiasmo. - La música está genial y podría ser divertido.
Michel asintió rápidamente. - ¡Eso suena perfecto!
- ¡Vamos entonces! - animó Luis, extendiendo su mano hacia Oriana.
Mientras todos se dirigían hacia afuera mientras Annie ponía música por un pequeño parlante, Cristóbal sintió que el ambiente se relajaba un poco. Lisandra lo miró con una sonrisa alentadora, mientras él trataba de disfrutar el momento a pesar de la tensión que sentía.
Annie bailó con Michel, tratando de desconectar de las preocupaciones y de ser un buen apoyo para Cristóbal, aunque no podía evitar sentir una extraña conexión con Michel. La noche siguió adelante con risas y música, pero los sentimientos no desaparecieron tan fácilmente.
La fiesta continuaba, y la música había cambiado a una melodía más suave. Annie, sintiéndose un poco agotada pero emocionada, decidió alejarse del bullicio de la pista de baile. Se acomodó en un sillón en una esquina, tomando un respiro mientras observaba a los demás disfrutar.
Lisandra, que había estado riendo y bailando con el grupo, la vio sola y se acercó.
- ¿Todo bien? - preguntó Lisandra, sentándose a su lado, su voz sonando suave entre el murmullo de la fiesta.
Annie sonrió, intentando parecer despreocupada. - Sí, solo necesitaba un pequeño descanso. Ha sido una noche intensa.
Lisandra la miró con curiosidad, su expresión mostrando interés genuino. - Te ves bien. Es genial verte divertirte.
Annie sintió un ligero rubor en sus mejillas al recibir el cumplido. - Gracias, creo que es solo el ambiente. - trató de restarle importancia.
Lisandra sonrió, pero su mirada se volvió más intensa. - A veces es bueno alejarse del ruido y simplemente disfrutar del momento.
La proximidad entre ellas creaba una sensación eléctrica, y Annie sintió su corazón latir más rápido. - Sí, claro... a veces hay que tomarse un respiro. - dijo, aunque sus palabras sonaban más como una evasiva que una afirmación.
Lisandra se inclinó un poco más cerca, el aroma de su perfume envolviendo a Annie. - Sabes, no suelo abrirme con la gente, pero me siento cómoda contigo.
Annie sintió una mezcla de emoción y nervios. - Me alegra escuchar eso. - contestó, tratando de mantener la conversación ligera. - Yo tampoco soy de compartir demasiado.
Ambas rieron un poco, pero la tensión en el aire seguía creciendo. Lisandra, sintiendo el momento, dijo: - Bueno, siempre es bueno tener alguien con quien hablar. No es necesario hacer de esto algo complicado.
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𝘿𝙤𝙗𝙡𝙚 𝙩𝙚𝙣𝙩𝙖𝙘𝙞𝙤́𝙣
Любовные романы𝐍𝐨 𝐬𝐞 qué se me pasó por la cabeza a entrar a un reality sabiendo de que va a tener muchos problemas. Pero aparte tener problemas también tuve nuevas amistades, risas, llantos, pérdidas de personas muy importantes que se hicieron mis amigos. Alg...
