14 DE FEBRERO 1975

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Una fecha como esta no le haria cometer un agravio contra su persona, como un acto de cursileria como estaba notando en las otras parejas. Pero eso no queria decir que no se diera el lujo de consentir al mago que tan feliz le hacia.

Cruzo algunos pasillos hasta encontrar al fondo de las estanterias, doblando hacia su izquierda hasta que lo vio sentado en una solitaria mesa de estudio plagada con ediciones de diversos temas mágicos, algunos de pociones, otras de criaturas mágicas, herbología, la sola visión le hizo sonreir al saber que su chico era un verdadero devorador de conocimiento.

Al acercarse noto entonces que el libro que tenia Severus en sus manos era de fases lunares, sin pensarlo se sento a su lado removiendo un poco los libros para hacerse de un espacio en la mesa.

-Me reiría pero siendo sinceros, no me sorprende... Solo a ti se te ocurre un lugar de reunion tan "romantico" -aun si solo queria molestarlo un poco, reconocia lo practico que era encontrarse en un lugar semi vacio como este. A excepcion de las pocas parejas que estudiaban.- En fin feliz día de San Valentin

El chico apenas y desvío la mirada del libro.

-Odias San Valentin -fue mas una divertida observacion que otra cosa, finalmente bajando su lectura para encarar al rubio.

-¿Por qué odiaria un día para celebrar el amor? Especialmente cuando puedo consentirte con justificada excusa.

-Ah, no lo se. Tal vez porque es una celebración muggle

-Mmh, touché. Pero esa costumbre fue tan aceptada en el mundo mágico, que ya tiene su version del mito. Suficiente como para celebrarlo contigo, y porque no puedo devolver tu regalo...

Eso solo hizo reir a Snape

-¡Ay no! Tu comprando un regalo sin devolucion, que tragicamente conveniente Lucius -su comentario habia provocado una risa divertida en ambos, porque esta no era la primera vez que lo hacia.

Lucius habia aprendido a hacer trampa y evitar que devuelva los regalos, despues de descubrir que Snape era alguien reacio a recibirlos. Una actitud que afortunadamente tras mucha persistencia, habia desaparecido conforme su relacion avanzaba.

-¿Qué me compraste entonces? -cerro el libro y se movió suavemente en su asiento para verlo con mas comodidad

-Vaya, asi que conseguí malcriarte -a pesar de que ese comentario le hizo ganarse un golpe en su brazo con la pesada edicion, no se arrepentia- No te lo compre exactamente, porque yo lo hice

-Que tierno... ¿Es comida?

-Una parte del regalo es un día de picnic

-Entonces, ¿Qué me hicieron tus elfos? -sus labios formaron entonces una sonrisa burlona, pues sabia el desastre que era el rubio en la cocina.

-Bien, los elfos hicieron la canasta de picnic -admitirlo era algo frustrante, sin embargo retomo su sonrisa arrogante- pero esto lo hice yo mismo

Malfoy se dió la licencia de sacar su varita de dentro de su tunica escolar, con un fluido movimiento de muñeca golpeo tres veces el espacio vacio de la mesa de estudio dejando ver un tenue brillo azul formarse. Flameando ligeramente como el fuego el cual tan pronto comenzo se esfumo dejando ver un cofre caoba oscura tallado delicadamente con patrones de runas en los bordes.

Severus observo conmovido el detalle, tomandolo con cuidado pasando su mano sobre los grabados notando que estos brillaban en un oscuro reflejo plateado cuando los tocaba.

-Es muy dulce de tu parte, gracias

-Y no es lo mejor, abrelo, oculta algo que te va a encantar aun mas mon amour

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