König one shots

𝕺𝖇𝖘𝖊𝖘𝖎ó𝖓

(22/Sep/24)

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En su vida llegó a pensar en tener un interés durante su trabajo, estaba incorrecto ya que;

-En la militar no hay amor-

Se mentalizo con eso desde que empezó a trabajar como francotirador, aún tenía ese pensamiento mientras su rango subía, aún pensaba lo mismo siendo coronel, siempre pensó lo mismo.

Era tímido y un fracasado intentando socializar, ese era uno de los puntos negativos que tenía, aparte era una bandera roja andante. Nunca se supo expresar correctamente y era un celoso de mierda.

Sabía que estaba mal pero nunca supo cómo cambiarlo y un psicólogo no lo veía necesario, estúpido.

Todo le dió vuelta cuando conoció a una mujer, aveces la miraba desde a lo lejos cuando entrenaba. König era como una sombra andante, terriblemente alto pero silencioso aún que aveces sus pasos eran ruidosos y alertaban a la mujer.

Todo empeoró cuando fue a un bar por un par de cervezas junto a Horangi y se la topo, un vestido verde pegado que lo dejo embobado, estúpido.

Solo la observaba, la mujer tomaba y tomaba como loca mientras se divertía con el grupo de amigas que tenía y por supuesto Horangi ya no estaba al lado de könig, Horangi podía llegar a ser coqueto y ya tenía la nariz metida en el cuello de una de las mujeres.

König solo observaba a la mujer del vestidito verde, a pesar de tener esa linda figurita también tenía algo de músculos en sus brazos por su trabajo.

Otra punto extra que era atractivo en la mujer.

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Las semanas pasaron y el coronel aún se fijaba en la mujer pero ya de manera enfermiza.

Conocía todo de ella, sus gustos, sus disgustos, los lugares favoritos que tenía, sus comidas favoritas, con quién se juntaba, sus amigos, todo, realmente todo e incluso tenía una que otra fotografía de ella junto con un corazoncito y el nombre de la mujer 'lilith'.

Simplemente se arriesgo, una día la llevo a su oficina sin ningún motivo de trabajo. Solo la quería y eso era todo.

-Sal conmigo-

No fue una petición, era como una orden. Le entrego una cajita de chocolates en forma de corazón pero no espero que al instante Lilith le respondiera con un; -No-

Lilith se levantó y se fue dejando a könig con el chocolate y vergüenza entre las manos pero ese no sería el único intento. Hizo muchos intentos más, era intenso a pesar de las Miles de veces que lo rechazaron.

Le mandaba chocolates, flores y golosinas a la puerta de su dormitorio todos los días junto con notas que parecían más amenazas que peticiones para salir.

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-¿¡Por qué no!?-

Espeto el coronel, ya había pasado un tiempo y la cosa seguía igual, seguía siendo rechazado una y otra y otra, otra otra y otra vez sin ningún interés de parte de la mujer.

-Usted no acepta un no, coronel? Usted es intenso-

-¿Crees que me importa eso?, vas a salir conmigo quieras o no!-

Mientras más se negaba la mujer, más insistente se volvía el coronel llegando a un punto de rogarle una salida estúpida a un lugar estúpido.

Friendzone.