-' Maestro Hanie '- (jaehyun x leehan)

Único

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Kim Donghyun, mejor conocido como Leehan, trabaja como maestro de prescolar, siendo popular entre los niños como el maesto Hanie.

Desde siempre había tenido cierta conexión con los niños, es por eso que al entrar en la universidad decidió irse por educación inicial.

Su actitud parecía atraer a los niños, es por ellos que se había ganado el cariño de los pequeños y el aprecio de muchas madres y representantes.

En especial, de cierto chico de cabellos castaños y ojos brillantes.

Su historia había algo cliché, un día el castaño le había hecho el favor a su hermana de llevar a su sobrino a la escuela, quedando inmediatamente flechado por el chico de cabellos rubios que recibió al pequeño con una sonrisa.

Desde allí, había empezado a llevar a su sobrino todos los días con tal de ver el angelical rostro del maestro.

Leehan estaría mintiendo si dijera que el peli castaño no había llamado su atención cuando iba a llevar a su pequeño alumno.

Un día que tomó valentía le preguntó si tenía planes ese fin de semana, por lo cual el maestro negó y dijo que estaba libre, por lo que intercambiado números y cuadraron una cita para ese sábado.

De allí empezaron a hablar, y más citas vinieron, ya se imaginarán el resto de la historia.

Gunwook, el sobrino de Jaehyun y alumno de Leehan, estaba más que encantado con la noticia que su tío favorito estaba con su maestro favorito

¿Acaso el pequeño Wook podría tener más suerte?

Cabe decir, que varias madres solteras se sintieron un poco decepcionadas ante tal noticia, puesto a qué ya no tenía oportunidad con el lindo chico.

Pero eso era lo de menos para Leehan, pues él ya había encontrado a su príncipe azul.

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— Maesto Hanie — llamó uno de los pequeños.

— ¿Si, Matt? — preguntó Leehan mientras ponía pegatinas a las tareas de los niños.

— Uhm, ¿qué pasa si yo siento maripositas en mi barriguita cuando veo al alguien? — preguntó el pequeño rubiecito mientras jugueteaba con sus manitas.

El rubio mayor dejó lo que estaba haciendo para enfocar su mirada en el niño, regalándole una de sus características sonrisas.

— Eso es completamente normal, cielo — dijo con suavidad — ¿Quién te hace sentir esas mariposas? — quiso saber.

— Wook, él me hace sentir maripositas en mi barriguita — confesó con una sonrisa y las mejillas rojitas — Él también las sientes, él decirme.

Leehan sonrió por lo adorables que eran.

— Pues, eso significan que ambos se aman — dijo — Aunque aún están pequeños para ser novios.

— Cuando Wook y Matt crecer, ¿ellos poder ser novios como Hanie y su príncipe perrito? —preguntó.

— Solo cuando Wook y Matt sean grandes.

Contento con la respuesta, Matthew se fué corriendo de allí.

— Son mucha azúcar para mí corazón — opinó una voz tercera que Leehan bien conocía.

— ¿Sungho te dejó pasar? — preguntó con notoria sorpresa.

— Tomé mis precauciones y le compré unas nugets, además le mandé un mensaje a Riwoo y me dijo que me fuera una vez haya terminado el recreo — explicó Jaehyun mientras ponía las bolsas con comida en el escritorio — Le traje algunos dulces a los niños.

Algo que había hecho que Leehan cayera más es que Jaehyun siempre tenía presente a sus niños cuando le llevaba algo al colegio.

— ¿Entonces el pequeño Matthew y el travieso Gunwook están enamorados? — preguntó mientras mordía una de las brochetas de cordero.

— Tal parece, sienten maripositas en la barriguita cada vez que están juntos.

— Uhm, yo también siento maripositas en la barriguita cada vez que te veo — dijo para molestarlo, amaba ver al rubio avergonzado y con sus mejillas rosadas, justo como ahora.

— ¡Hyung! — le reprochó sacándole una risa al mayor y que este le dejara un beso en la mejilla.

— No te enojes ¿Si? Sólo nos quedan cinco minutos.

Mientras ellos tenían su mini discusión, seis niños los veían desde el castillo.

— ¡Parecen un príncipe y su princesa! — exclamó una niña.

— Pero el maesto es un niño — dijo otro niño, resubiendo un zape por parte de otra niña — Ay.

— Tonto, el maestro Hanie puede ser una princesa si quiere, él dijo que podemos ser lo que queramos — le recordó.

— ¡Son tan lindos! — exclamó Matthew, recibiendo un asentimiento por parte de los demás.

Sí, ellos eran muy lindos

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Muchas gracias a mininchiw por su permiso para adaptar su hermosa historia ❣