CAPÍTULO 0

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ISLEEN

Permanecí inmóvil por un par de minutos, aferré la mano al asa de mi maleta tan fuerte que el calambre no demoró en aparecer. El auto estaba frente a mis narices, el señor quien era el conductor, me hizo una señal para que me apresurara.

Sabía que si abordaba el auto no habría vuelta atrás. La noche anterior mi madre ya había tomado su decisión, no podía ir en contra de ella aunque mis deseos de aferrarme a esa casa eran muy fuertes. Quería contemplar la idea de regresar en algún momento, pero en el fondo sabía que sería casi imposible.

Contuve el llanto, intenté aligerar el nudo que me impedía hablar y por último abordé el auto.

—¿Nerviosa?

La dulce voz de Isabella amenazó con desatar el nudo del llanto. No quería llorar. Ella cargaba con el peso de la muerte de papá, yo también lo hacía, pero aun así no quería verla derrumbarse en mis brazos. Ya lo había hecho, no volvería a permitir que sucediese.

—Mucho —contesté con los puños sobre mis piernas—. ¿Cómo habías dicho que se llamaba ese pueblo?

Landow, prometo que te gustará y harás muchos amigos.

Aún con el dolor que la envolvía, no desperdició la oportunidad para tirar de sus labios. Pegué la cabeza a la ventanilla, el motor rugió devuelta haciendo que en poco tiempo nos alejemos del lugar.

Esperaba no arrepentirme.

Marca infernal #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora