Candyfloss ★ Chaelisa

Épilogue

-Si está no fuera tu primera vez, diría que ya habías hecho esto antes. -comentó Lisa peinando con sus dedos el cabello humedecido de sudor de su novia.

Ambas se encontraban acostadas sobre la cama, aún desnudas, Rosé tenía una pierna sobre las de su novia y su cabeza apoyada en el pecho de esta, mientras la morena la acicala dulcemente.

Rosé hizo una pequeña mueca con pena.

-Bueno... De hecho, hay algo que nunca te conté. -confesó la mayor bajando la mirada pero ganándose a la atenta de Lisa, que reaccionó de inmediato.

-¿En serio? ¿Y puedo saber de qué se trata, señorita? —cuestionó bromeando.

Rosé suspiró profundo y se separó de la morena para sentarse en la cama evadiendo su mirada, sin embargo, Lisa frunció el ceño y la tomó por el mentón obligando a mirarla. —¿es algo malo? —la neozelandesa negó. -Entonces puedes contarme, venga, me siento contigo y me dices.-se acomodó a su lado mientras le sostenía la mano y tocaba sus nudillo con los pulgares, Rosé sonrió por el gesto.

Quizá era hora de contarle su mala experiencia.

-Antes de que tú y yo nos conociéramos tuve un novio-Lisa abrió sus ojos sorprendida, en todos estos años nunca se habia enterado de aquello. —, iba a ser nuestro quinto mes de noviazgo y yo quise perder mi virginidad con él, la cuestión es que yo era muy insegura en ese aspecto; no sabía si cumpliría sus expectativas y quedase decepcionado por una mala experiencia la pelinegra ya se estaba haciendo una idea de a dónde iba a llevar esta confesión. —, cuando íbamos a hacerlo le conté sobre mi obvia inexperiencia e inseguridad, así que él me prometió guiarme y asegurarme de que iría bien, sin embargo... -Rosé tomó una ligera bocana de aire antes de seguir. —cuando estaba haciendo el sexo oral lo miraba muy incómodo y aunque gimiera su rostro seguía viéndose extraño, de un momento a otro paró todo y me levantó, dijo que lo dejaríamos para luego y que pasaríamos a lo otro... Ya sabes-Lisa asintió atenta a las palabras de su novia. Tal vez no le gustaba la idea de escuchar que otro tipo fue quien tomó la virginidad de su novia primero, le molestaba, pero quería ocultarlo para no hacerla sentir mal, ella estaba por muy encima de todo. -Pero yo estaba tan insegura que ni siquiera gesticulaba nada, él estaba aburrido y no alcanzó a tener ningún orgasmo. Al final se hartó, cogió sus cosas, se vistió y se dispuso a irse, no sin antes decirme que habia sido el sexo más nefasto e insípido que haya tenido. Mi mayor inseguridad se había hecho realidad, y es por eso que siempre traté de evadir ese tema contigo...-Lisa la miró con culpa y un mohín se formó en sus labios. -Oh, mi amor, no me digas eso...

-Perdóname, sé que tal vez esperabas esto desde hace mucho y yo me resistí por tanto tiempo.

-¡Hey, no!—tomó su mejilla, acunándola.—no tienes que disculparte por nada, tu antiguo novio fue un cabrón y lo más seguro es que el idiota haya sido gay, sino no me explico que haya quedado disgustado con una mujer tan preciosa como tú —aquellas palabras lograron sacarle una sonrisa a la neozelandesa. —ugh, yo también fui una hija de puta, pensaba con la polla y no con la cabeza, no me tenía idea de cómo te sentías realmente. —la pelirosa rió y se acercó a robarle un besito.

-Si yo me disculpo tú tampoco tienes por qué, a ambas nos has gustado y confieso que este fue el mejor sexo de mi vida.

Lisa con picardía y relamió sus labios antes de hablar. —pues, si tu coño me deja podría--dejó de hablar recordando un importante detalle que durante todo este tiempo había olvidado por completo, y que tal como lo dijo, su polla era la única que pensaba ahí. —Oh, mierda.

-¿Sucede algo? —preguntó Rosé al ver la cara de angustia de Lisa.

-Olvidé ponerme el jodido condón. ¿Ves cuando te digo que mi pene piensa más que yo? ¡Ugh!-gruñó a lo último echándose para atrás en la cama.―te llené de semen maldita sea, lo más probable es que ahora quedes embaraza por mi culpa.

Rosé frunció el ceño con una sonrisa y simplemente se rió, le daba ternura la reacción de su novia al recordar que eyaculó en su interior sin protección. Pero la idea no le desagrada en absoluto, era emocionante.

-Amor~- -se echó sobre su pecho abrazándola en el proceso, Lisa le correspondió.-me alegra que hayas hecho eso, adoro la idea de tener hijos tuyos.- ¿Acaso a ti no?

Lisa se sorprendió, pues ella esperaba una respuesta negativa. -Uh... S-sí, pero yo pensé que no estabas lista y como soy tan tonta para dejarte embarazada sin tu consentimiento, tal vez tú-

Rosé carcajeó por la manera rápida y nerviosa en la que su novia le hablaba. Así que le puso un dedo índice en sus labios, callandola. -calma, ya entendí y te dije que me encanta la idea de quedar embarazada y más aún si viene de ti.

Lisa sonrió y tomó su mano para besar la palma, un beso cálido y amoroso.

-Y a mí me ilusiona la idea de verte llevar un pequeñito... O pequeñita en tu vientre.

-Que tal ambos.

-Hey, tampoco hay que pasarnos de humildes. -Rosé volvió a reír.

-Te amo. —la mayor se acercó hasta la tailandesa, plantando un beso en sus labios que fue correspondido de la manera mas suave y dulce posible.

-Yo más hermosa, yo más...

Gracias por leer espero les haya gustadoo, si quieren más historias Chaelisa pueden pasearse por mi perfil tal vez alguna les agrade.

Y vuelvo a agradecerles por leer la historiaa. 

Les amooo.