Desgraciadamente confundido

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Capitulo uno:

Jonathan Reed siempre había sido alguien violento, lleno de ira, cualquier pequeño inconveniente colmaba su paciencia haciéndolo estallar, su mismo carácter le había forjado una mala reputación en la escuela, era el chico con el cual nadie quería meterse, era de temer, Alfie, Percy y Jonathan formaba ese grupo de bullys del cual nadie deseaba tener problemas, Percy había estado en un reformatorio por intento de asesinato o eso se rumoreaba en la secundaria, Alfie y Jonathan no se quedaban atrás con la cuentas de delitos, robos a mano armada y delitos de violencia, manchaban el historial de los tres chicos. Jonathan iba en diferente clase que sus dos amigos, por justas razones, nadie se sentaba con él, era sarcástico, violento y tenía ese humor manchado de negro, que era más que obvio que estaría solo en esa aula hasta que la escuela finalice, si es que no lo expulsaban antes. Jonathan detestaba esa aula, y no solo por los presumidos de sus compañeros, si no por él, Noah Turner, Presidente de la clase, alumno ejemplar y capitán del equipo de volleyball, con ese hermoso cabello color café, y pecas que hacían resaltar aún más su belleza, traía a todas las chicas detrás y parecía no importarle, como si ya tuviera a todas las que deseara y no se preocupara por hacer nada para mantenerlo así mismo a la larga del tiempo, ante los ojos de Jonathan, Noah no era nada más que un presumido, tal vez Jonathan sentía celos, quizás quería ser como el, tener un poco de su buena fama y dejar aquel historial manchado atrás, pero Noah no era el único con esos sentimientos encontrados, ser otra persona era también lo que Noah quería, dejar esa vida perfecta y cometer errores como todo humano. Noah se encontraba sentado sobre una mesa cuando Jonathan entro al salón.

- Vas a ir a la fiesta de hoy, Noah. - dijo Nina con un tono de voz sumiso y fino mientras lanzaba esa mirada de cachorro al chico ideal.

- Lo siento Nina, Debo trabajar hoy. - Respondió el mismo

El profesor entro al salón y como por arte de magia todos los jóvenes se sentaron en sus puestos, era un hombre imponente y bastante serio. Una vez la clase finaliza, el profesor Philip se acerca al pupitre de Noah y le susurra al oído, Jonathan era observador, y se había percatado que no era la primera vez que esos dos tramaban algo, era una corazonada, Noah y el profesor salieron del aula junto con todos los demás, pero Jonathan planeaba seguirlos, y así fue, cuando Noah entro a la oficina del profesor y cerró la puerta, Jonathan rápidamente acerco su oído a la madera de la misma, hubo un gran silencio seguido de un estruendo para luego comenzar a escuchar jadeos y gemidos envueltos en placer, era la oportunidad perfecta para arruinar la fantasía del chico perfecto que tenía montada Noah, Jonathan no lo dudo dos veces, y saco su celular, Jonathan no tenía mucho dinero por lo que su teléfono era uno viejo y trizado, pero serviría para grabar, coloco la cámara y paso lentamente el celular por el espacio que queda entre la puerta y el suelo, y con un ligero movimiento con la yema de sus dedos lo levanto para poder grabar, dos minutos y luego se fue ¿Su plan? Enviarlo a toda la escuela, pero debía verlo para poder saber si era lo que él creía, se dirigió al baño de su hogar, un baño sucio y desordenado, coloco el video, y en ese instante se dio cuenta cuanto desearía ser el profesor, siendo penetrado por el chico más deseado de la escuela, deseado incluso por él, y jamás se había dado cuenta, estuvo confundiendo amor con odio todo este tiempo, la sangre le hirvió, como un profesor podía aprovecharse de un menor de tal manera, ocupándolo tan solo como una maquina sexual, no se quedaría de brazos cruzados, todos esos pensamientos lo abrumaban, ¿acaso era gay? ¿acaso le atraía el imbécil de Turner? No importaba debía hacer algo para detener al profesor Philip.

¡Sal de ahí imbécil! debo de ocupar el baño. - Pronuncio la hermana de Jonathan desde fuera del baño

¡Estoy ocupado maldita perra!

Cuando salgas del baño voy a arrancarte la lengua por llamarme así. - Dijo Kelly

como sea Kelly, cierra la boca.

Jonathan guardo su teléfono, se paró y salió del baño, una severa preocupación se veía reflejada en su rostro.

¿Estas bien hermanito?

Déjame en paz. - Respondió Jonathan

Kelly no se vio afectada por el mal trato, solo se notó asustada, por el comportamiento de su hermano menor, técnicamente lo había criado, sabía que algo le sucedía con tan solo mirarlo.

Jonathan en camio, se dirigió indiferente hasta su habitación, se cambió de ropa y luego se acostó en su cama, sin lograr conciliar el sueño, su corazón latía rápido y con fuerza, por más posiciones diferentes que probara no podía dormir, luego tomó su celular, y abrió ese video, lleno de dudas, lleno de deseo, coloco play al video y su mano comenzó a recorrer su abdomen, era tentador, un pequeño jadeo se escabullo entre el silencio de la noche, su mano llegó a su entrepierna y mientras volvía a colocar el video una y otra vez, hasta que terminó, la culpa lo invadió, lanzo el celular lejos con tanta fuerza que el mismo se quebró, se sentía deshecho, cargaba con el peso de un secreto que acababa de descubrir, le gustaban los hombres, o simplemente Noah, no lo sabía, pero sentía como si toda su vida hubiera sido una farsa, se había acostado con muchas mujeres a lo largo de su vida, y ninguna le dio la satisfacción que imaginar a Noah dentro de él le proporciono, se golpeó a si mismo la cabeza lleno de ira, misma ira que ocuparía en contra del profesor a la mañana siguiente. 

Two timesWhere stories live. Discover now