Al atravesar un portal místico durante una misión, Rin Okumura, el hijo del mismísimo Satanás, se encuentra en un mundo completamente diferente al suyo: Monster High. Rodeado de adolescentes monstruosos con problemas tan diversos como divertidos, Ri...
El caos había sido el compañero constante de Rin Okumura, tanto en la academia True Cross como en su vida diaria. Pero esto... esto era algo completamente nuevo. Ante él, un enorme edificio que parecía sacado de una película de terror se alzaba imponente bajo un cielo púrpura. Las gárgolas de la entrada parecían observarlo mientras cruzaba el umbral, sintiendo una vibración única en el aire, como si cada piedra del lugar estuviera viva.
"¿Quién eres tú?" preguntó una voz con tono intrigado.
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Rin giró rápidamente para encontrarse con una chica de cabello electrizado y piel con costuras que le sonreía con curiosidad.
"Rin Okumura," respondió, intentando sonar seguro aunque por dentro estaba completamente descolocado. "¿Qué es este lugar?"
Ella rió ligeramente. "Esto es Monster High. Aquí, todos somos un poco... peculiares."
Mientras Rin avanzaba por los pasillos llenos de criaturas que jamás habría imaginado coexistiendo en armonía, algo empezó a gestarse en su interior. En un mundo donde él siempre había sido el monstruo, ¿podría este ser el lugar donde, finalmente, ser un monstruo no era algo malo?