tres.

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La chica con mirada aterradora ignoró su presencia y se dirigió a Dahyun como si nadie más estuviera ahí —Llevenlo a la lavandería y que quede impecable

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La chica con mirada aterradora ignoró su presencia y se dirigió a Dahyun como si nadie más estuviera ahí —Llevenlo a la lavandería y que quede impecable.— Su voz autoritaria hizo temblar a todos los presentes.

Minatozaki dio media vuelta y se encerró en su oficina, dando un portazo que hizo retumbar el piso completo.

Tzuyu se permitió respirar, pues estaba tan tensa que lo había olvidado, Dahyun la ayudó a levantarse del suelo —Tú también deberías intentar limpiarte.— le aconsejó. La taiwanesa asintió y Dahyun le mostró el baño de damas.

La taiwanesa se miró al espejo mientras se quitaba las medias que se habían ensuciado con el café y tembló por los sentimientos que se estaba guardando, ya que no quería explotar en su primer día.

Miró sus manos temblando y recordó que hacía mucho tiempo que no tenía esos temblores —Tranquila, lo resolveras.— Se dijo mientras obligaba a su mano para que se detuviera.

Regresó a la puerta que decía "Ms. Minatozaki" e ignoró las miradas curiosas de los demás, pues ahora solamente le importaba conservar su trabajo.

Tocó la puerta dos veces y volvió a oír esa voz fría —Pase.— Casi le recordaba a la voz de su profesor de la primaria, quien era muy estricto y anticuado.

Ingresó a la habitación, encontrándose algo que ya había visto antes; la japonesa tenía los ojos cerrados mientras respiraba lentamente, casi parecía estar durmiendo, de no ser porque su dedo índice se movía sin parar.

—Señorita Minatozaki he venido a disculparme por lo ocurrido en el pasillo.— Por primera vez su voz tembló estando con alguien importante, cosa que la hizo sentir frustrada.

La chica en la silla no tenía intenciones de mirarla —Mhm, ¿Eres la asistente nueva verdad?— habló sin abrir los ojos y con un tono cansado.

Tzuyu tragó saliva —Sí, señora.— Miró al suelo, sintiéndose incapaz de verla furiosa.

La de flequillo parecía estar quedándose dormida —Solo vete y no jodas más mi vida, ya es bastante mala.— su voz baja denotó el sueño que sentía.

Tzuyu tembló en su lugar —Pero señorita es mi primer día...— sus lagrimas amenazaron con salir, lo que hizo que la tailandesa frente a ella al fin la mirara —Vete afuera, no te estoy despidiendo, aunque debería hacerlo por ser tan estúpida, ya que arruinaste mi único traje blanco.— Abrió un cajón cerrado con llave y de ahí sacó una botella de vodka.

Tzuyu pensaba que era muy temprano para beber, pero prefirió abstenerse de comentarios y acatar las órdenes de su jefa —Entendido señorita.— hizo una reverencia y salió de la oficina.

Sana se sirvió un shot de vodka y lo tomó todo, cerró los ojos por el sabor desagradable, pero siguió tomando.

Sana se sirvió un shot de vodka y lo tomó todo, cerró los ojos por el sabor desagradable, pero siguió tomando

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⏰ Última actualización: Oct 01 ⏰

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