❥ 19

78 11 1
                                    

Habían pasado varios días sin dirigirse una sola palabra, a veces, se encontraban mirándose el uno al otro, pero desviaban la mirada enseguida. ¿Qué tan orgullosos podían ser y por qué ninguno parecía dispuesto a dar el primer paso?

Jeongin definitivamente no lo haría, fue Chan el que lo había lastimado, no se dejaría humillar por él de nuevo. Mucho menos, tenía ganas de escuchar de los labios de Chan que jamás podrían volver a ser amigos, eso le rompería el corazón de manera definitiva.

Estaba terminando de guardar sus cosas en su mochila, casi todos sus compañeros ya se habían retirado cuando Miyeon se acercó a él, se sentó cerca y se cruzó de brazos.

—Chan y tú pelearon, ¿verdad? —afirmó ella y Jeongin rodó los ojos.

—Estas preguntando lo obvio y no tengo idea del por qué te interesa —dijo, no pudo evitar que su tono de voz saliera molesto. Ella no le había hecho nada, pero era por ella que había iniciado todo este desastre.

—Por la tarde iremos al Karaoke, ya sabes, el de siempre. Chan ira, deberías unirte y tratar de reconciliarse, o terminar de una vez por todas.

Jeongin chasqueo la lengua, ¿terminar? Ellos ni siquiera estaban saliendo de verdad. Se colgó su mochila al hombro y miro a Miyeon por última vez.

—Los alcanzare después. No quisiera que Chan se arrepintiera de ir si me ve salir con ustedes.

—Está bien —Miyeon sonrió y se levantó para irse también, pero se detuvo y miró a Jeongin—. ¿Sabes que nuestros padres querían que Chan y yo nos casáramos?

Jeongin la miró fijamente y asintió.

—Lo sé, pero no tiene nada que ver conmigo.

—Es porque tú sales con él, que no funcionó, pero si ustedes terminan, ¿crees que tenga una oportunidad?

Jeongin apretó la mirada y los puños.

—¿No es descarado de tu parte preguntarme eso? ¿Lo haces al propósito o sólo eras una loca?

La expresión de Miyeon fue de sorpresa y negó rápidamente.

—Sólo tenía curiosidad, tal vez él no es completamente gay, él me ha pedido salir. Pero no quiero salir con alguien que todavía tiene novio.

Esta vez fue Jeongin el sorprendido. Pero después sonrió amargamente.

—Chan es mío —declaroy sin decir nada más, salió apresurado, maldiciendo a Chan en su cabeza, una yotra vez que seguramente al moreno le ardían las orejas.

—Chan es mío —declaroy sin decir nada más, salió apresurado, maldiciendo a Chan en su cabeza, una yotra vez que seguramente al moreno le ardían las orejas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿A los cuántos besos dejamos de ser amigos? ☘ ChanInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora