3.La caminata

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Quiero que entreguéis vuestros Louies —les dijo el director a la mañana siguiente, una vez que estaban todos reunidos.

La sala se inundó de preguntas como "¿Qué?" y "¿Por qué?" hasta que Louis aclaró:

—Es un reto de navegación y trabajo en equipo —dijo mientras todos se miraban entre ellos—. Una caminata de dos días en las montañas de Santa Bárbara.

Charlotte y Max se miraron confundidos mientras entregaban sus Louies.

—Hay tres banderas para cada casa escondidas en el camino —continuó Louis—. La primera casa en encontrarlas gana. La perdedora tendrá que limpiar y ordenar todos los jardines, ya que llevamos un mes sin encargado de mantenimiento, mientras que la ganadora disfrutará de un día en la playa.

—Espere, ¿qué es esto? —preguntó Parker, sosteniendo un papel.

—Se llama mapa; es lo que se usaba para guiarse antes de los smartphones y los Louies —le respondió Charlotte, lo que se ganó varias malas miradas de las Águilas y una mirada orgullosa de Max y otros Cuervos.

—Efectivamente, señorita Smith —dijo Louis con una sonrisa, para luego continuar—. Capitanes, por favor.

Leo y Sophie se acercaron.

—Estos walkie-talkies son solo para casos de emergencia. Si se usan, la casa renuncia y pierde. Ahora, haced las maletas. El autobús sale en diez minutos.

De nuevo, más preguntas llenaron la sala: "¿Diez minutos?" y varios "¿Qué?".

De nuevo, más preguntas llenaron la sala: "¿Diez minutos?" y varios "¿Qué?"

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Ambas casas se encontraban de camino por las montañas.

Mientras Leo y Hayley discutían de como se leía el mapa, Max y Charlotte iban atrás del todo.

Max caminaba en silencio, escuchando el eco de las voces de Leo y Hayley resonar por el sendero montañoso. Estaban discutiendo—como de costumbre—sobre la mejor forma de interpretar el mapa que llevaban, mientras el resto del grupo de los Cuervos les seguía, manteniendo cierta distancia. Ese día se sentía algo triste ya que Jackie lo había dejado. Miró como el sol comenzaba a bajar, tiñendo el paisaje de tonos cálidos de naranja y oro. Max observaba el horizonte, pero su mente estaba en otro lugar.

A su lado, Charlotte caminaba con pasos ligeros pero decididos. Era su primera caminata importante como parte de los Cuervos, y Max no podía evitar preguntarse cómo se sentía al respecto. Charlotte había llegado a la Academia Greenhouse hacía solo unas semanas, una recién llegada que rápidamente se había ganado un lugar en el equipo de los Cuervos. A pesar de su aparente calma, Max sabía lo difícil que era adaptarse a un lugar como la Academia, y más aún a un equipo como el suyo.

"¿Qué tal te va todo hasta ahora?" preguntó Max, rompiendo el silencio que los rodeaba. Sabía que Charlotte no había tenido mucho tiempo para conocer a nadie a fondo aún, y aunque no solía ser el primero en iniciar una conversación, sentía que debía hacerlo. Si iban a ser compañeros de equipo, lo mínimo era empezar a conocerse.

Heartbreak of Feathers(Max Miller)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora