Teen Wolf: T3 [Derek Hale]

Capítulo 1

Los meses pasaron y todo parecía ir bien.

Pero como la mayoría de ocasiones, hay una excepción.

Alan Argent.

El Omega puro la estaba pasando terriblemente mal, supuso que parte de su malestar se debía a la salida de algunos miembros de la manada, como Erica y Boyd. De ellos, no se sabía absolutamente nada.

También estaba terriblemente preocupado por la desaparición de Issac, pues este en el último encuentro (que fue en la lucha contra Gerard y Jackson) le había dicho que ya había decidido quedarse con el resto de manada que quedaba: Derek, Alan y, desafortunadamente (según el Omega y alfa) Peter.

El día siguiente, Issac solo había desaparecido sin dejar rastro alguno.

Los constantes comentarios de Lenny tampoco le ayudaban, insistiendole que le dejara salir y actuar por si solo para poder encontrará a los responsables de la desaparición del cachorro sexy y matarlos (además de matar también a Allison).

Obviamente, la razón por la que no lo dejaba "salir" era por el bienestar de Allison.

No sabía de lo que era capaz Lenny, pero, lo que si sabía es que era peligroso cuando se lo proponía, puesto que ya muchas veces tomaba control de su cuerpo haciendo cosas que lo avergonzaban, como por ejemplo: seducir al alfa muy atrevidamente.

Cuando Lenny tomaba el control lo hacía, para cuando Derek ya estaba por comenzar a besarlo con el poco autocontrol que le quedaba y un notable bulto atrapado en sus pantalones, dejaba volver a Alan.

Y el Omega se apartaba muy avergonzado y nervioso sin darle explicación alguna a su alfa.

Aún no estaba listo para revelarle a alguien sobre que su conciencia tenía vida propia y hasta un nombre. Además del tema que evitaba siempre: hablar sobre el día en que se había convertido en un lobo por completo.

Al final, el trío de amigos olvidó ese suceso por petición de Alan.

Hablando de sus amigos.

Era de noche y los tres se encontraban en una tienda de tatuajes. Scott quería comenzar una "nueva" etapa en su vida, por lo que quería comenzarla con un tatuaje.

Alan también lo quería y se lo haría luego de su mejor amigo beta, solo por seguridad y por curiosidad de lo que pasaría siendo un hombre lobo, ya que la aguja para tatuar perforaría la piel de Scott, lo que significaba que podía sanar en cualquier momento.

Era mejor prevenir que lamentar.

Stiles por su parte, solo se dedicaba a ver a Scott con duda mientras le preguntaba cada ciertos segundos si en verdad estaba seguro, puesto que un tatuaje era permanente.

Scott McCall y su terquedad eran inseparables, así que Stiles no insistió más.

Cuando el tatuador comenzó su labor, Alan agarró a un Stiles desmayado antes de que cayera al suelo.

En definitiva, amaba que esos dos fueran sus mejores amigos.

...

Luego del tatuaje, Alan decidió que mejor se tatuaría otro día al ver la cara dolida de Scott.

— ¿Estás bien? — preguntó Alan a Scott algo preocupado ya cuando se subieron los tres al Jeep de Stiles.

— Arde un poco. — respondió entre quejidos Scott.

— Si, acaban de apuñalar tu piel como cien mil veces...con una aguja — lo último dicho por Stiles sonó titubeante y tembloroso.